La primera rutina de "el Flaco" y "el Indio" recordó el éxito arrollador de 1996.
Leonardo Farkas fue otra vez protagonista, esta vez como blanco de bromas.
 |
| Medina y Vásquez cumplieron en Viña. (Foto: UPI) |
Aunque el inicio fue arrollador y amenazaba con un nuevo éxito histórico para Dinamita Show, dos flojos bis terminaron por calmar las aguas en la Quinta Vergara y facilitar la tarea de los conductores.
Al salir, Mauricio Medina anunció que el ballet que los acompañaría no saldría "porque Santana estuvo ensayando toda la tarde" y debió iniciar su rutina en solitario para ganar tiempo.
La salida de Paul Vásquez, poco después, consolidó las risas en la Quinta con alusiones a la diabetes que afecta a su compañero y arranques de baile al ritmo del grupo La Noche, ya todo un clásico festivalero.
Poco más de media hora después, con un público entregado que recordaba el arrollador éxito de 1996 -y las Antorchas en el bolsillo-, el primer bis dio paso a un arsenal de bromas y hasta una ranchera dedicada a Leonardo Farkas, que no prendieron mayormente entre el público.
La Gaviota igual bajó para Dinamita Show, que cerró con una brevísima tercera parte de sólo unos minutos de duración, dejando al público con ganas de algo más, sobre todo de su mejor arma, los chistes sobre su propia historia, la automofa sobre drogas, problemas legales e incluso enfermedades.
