Asi lo informó el jefe de la Unidad de Quemados del Hospital del Trabajador, Ricardo Roa.
Gonzalo Contreras, el más grave de ambos, ya respira por sus propios medios.
El jefe de la Unidad de Quemados del Hospital Del Trabajador, Ricardo Roa, se refirió al estado de salud de los dos brigadistas sobrevivientes al incendio de Carahue, región de la Araucanía, destacando la evolución que ha tenido el más grave de ellos.
El paciente más grave, Gonzalo Contreras ya fue desconectado y se encuentra estable dentro de su gravedad; además ha evolucionado de forma favorable al tratamiento que se le está aplicando en sus heridas, pero dada la gravedad de su estado, el pronóstico sigue siendo incierto.
Al respecto, Roa sostuvo que "nosotros estamos muy contentos pero tratamos de ser cautelosos. Nos cuesta a veces transmitir la exacta dimensión de las cosas, porque tampoco queremos que se hagan falsas expectativas. El paciente todavía es un paciente crítico, todavía es un paciente que tiene riesgo, tiene posibilidad de complicaciones dada la gravedad de su lesión inicial, pero sí, en este momento estamos muy contentos de la evolución que ha tenido".
"Probablemente el hecho de que sea un paciente joven, sano, de una buena capacidad física, haya hecho que su evolución sea favorable", agregó.
Durante el día martes, Contreras recibirá una serie de curaciones en los tejidos que se mantienen comprometidos a consecuencia del incendio.
En tanto el segundo brigadista, Julio Marín, ha tenido una evolución positiva de sus heridas y hasta el momento solo se registra daño sicológico, razón por la cual está siendo sometido a tratamiento intensivo para superar el trauma.
El médico cirujano recalcó que tanto para Contreras como para Marín, las siguientes horas son "fundamentales" para su recuperación.
