Esta zona tiene un "alto valor patrimonial y no debería ser apta para tareas mineras", indicó Matías Asún.
Detalló efectos negativos como talado de bosque nativo y emisión de polvo de carbón.
El director ejecutivo de Greenpeace en Chile, Matías Asún, alertó este lunes sobre las devastadoras consecuencias ambientales que tendría el proyecto Mina Invierno, que planea localizarse en Isla Riesco, ubicada en el Estrecho de Magallanes, y cuya aprobación votarán a las 15:00 horas de este martes las autoridades de esa región.
Según explicó Asún en conversación con Lo Que Queda del Día, la Mina Invierno es uno de los cuatro proyectos mineros que hay en la zona, y que son impulsados por "las empresas que tienen centrales termoeléctricas -los grupos Von Appen y Angelini-, que buscan proveerse de carbón para alimentar la Termoeléctrica Guacolda, lo que significa que van a seguir destruyendo el territorio de Huasco", en la Región de Atacama.
Desde este punto de vista, el proyecto es malo "en el plano de la política energética", pero también lo es "en el plano local", ya que Isla Riesco es una "zona de alto valor patrimonial y no debería ser apta para este tipo de tareas mineras".
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| El proyecto minero de los grupos Von Appen y Angelini se votará este martes en Magallanes. |
"El impacto ambiental que tendría en la zona el proyecto minero es devastador, muy negativo", sentenció Asún, identificando cuatro "grandes impactos":
"El impacto es mucho mayor que el que ha sido considerado en la evaluación ambiental", resumió el director de Greenpeace, resaltando la necesidad de que las autoridades promuevan "fuentes energéticas limpias y que la salud de las personas no sea uno de los valores de la ecuación sobre la energía en Chile".
