Este martes la empresa debe presentar las actas ante la Superintendencia de Valores y Seguros.
La compañía pidió nuevos recursos por 8.020 millones de dólares.
Este martes vence el plazo otorgado por la Superintendencia de Valores y Seguros a Enersis para que entregue las actas del directorio que aprobó el polémico aumento de capital en la compañía por 8.020 millones de dólares (casi cuatro billones de pesos chilenos).
A juicio de las AFP esta medida pasa a llevar el interés de los minoritarios, es decir, todos los cotizantes chilenos en el mercado laboral. Además acusan que la operación obedece a la situación de la italiana ENEL, matriz de Endesa España y complicada por la crisis en la eurozona.
De realizarse esta transacción se traduciría en una transferencia de riqueza desde los accionistas minoritarios de Enersis, representados por todos los chilenos que tienen fondos previsionales, a los accionistas mayoritarios de la compañía.
La ministra del Trabajo, Evelyn Matthei, mostró su inquietud por esta operación: "La duda básicamente es: se valorizaron bien esos activos o no. El dinero lo necesitan porque hace falta en Italia o en España o es para nuevas inversiones. Mientras no sepamos esas respuestas en forma muy clara y con muchos antecedentes, el mercado está nervioso y las AFP también".
El senador Jorge Pizarro (DC) criticó que "van a ser los recursos de los trabajadores chilenos los que van a permitir una operación de blanqueo y de evitar la baja del patrimonio de los capitales extranjeros. Creo que los organismos de supervisión de nuestro país deben actuar de manera mucho más categórica".
