Académico aseguró que tiene efectos abortivos y problemas en los aparatos reproductivos.
Diario relata que son fabricadas especialmente para Chile.
Las bombas lacrimógenas que usualmente utilizan los Carabineros para disipar las manifestaciones producen "graves daños a la salud", según el profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, Andrei Tchernitchin.
Las bombas, que fueron utilizadas recientemente en las protestas contra HidroAysén y el movimiento estudiantil, son fabricadas "exclusivamente" para Chile ya que están prohibidas en casi todo el mundo, relata El Mundo.
Tchernitchin, quien realizó un estudio en alumnos que habían ido a protestas, explicó que "hay antecedentes documentados de que los agentes químicos con que se fabrican las bombas lacrimógenas son abortivos" y "además de producir graves daños a la salud, inciden negativamente en los aparatos reproductivos masculino y femenino".
"Hay probabilidad de que las sustancias químicas de las bombas lacrimógenas afecten las funciones reproductivas, dañen al feto en el último trimestre del embarazo y a los niños en los primeros años de vida, provocando efectos en la salud que pueden resultar irreversibles", había asegurado el académico en declaraciones a Punto y Final.
Sin embargo aclaró que "no son mortales ni provocan enfermedades inmediatas, a menos que la persona inhale el gas bajo ciertas condiciones".
