Fonderos de Ñuñoa fustigaron prohibición municipal de tocar cumbias

Una dura polémica sostienen los fonderos del Estadio Nacional con el municipio de Ñuñoa por la ordenanza municipal que les impide tocar cumbias y otros ritmos que no chilenos de raíz folklórica algo que , según señalan los locatarios, los ha perjudicado en sus ganancias.

"La cumbia es una tradición en Chile, y la gente ha reaccionado malamente cuando le explicamos que por orden municipal no podemos colocarla. Incluso, han llegado a lanzarnos botellazos, poniendo en peligro a la gene que está al interior", indicó Nelson Morales, dueño de la fonda "En Familia".

Morales añadió que existe falta de claridad de parte del municipio al finiquitar los contratos de arriendos de los locales del recinto ñuñoíno mientras que para el dueño de la fonda "Los Compipas", Renán Encina, "hubo un cambio en las reglas del juego".

"Llevamos 12 años organizado esta fiesta y siempre ha sido así. No sé por qué ahora reclaman, cuando históricamente nuestra fiesta se ha caracterizado por tener sólo música chilena", replicó el alcalde de Ñuñoa, Pedro Sabat, a El Mercurio ante los reclamos.

Jeannete Lucero de "La Martina" destacó que existe preocupación en los locatarios por las posibles pérdidas económicas que la medida les pudo traer ya que el público nocturno busca en su mayoría fondas con este tipo de ambientación musical.