El ministro llamó a "ponerse las pilas" y trabajar en cada tema preocupante.
Coordinador del Simce pidió a los padres involucrarse para impulsar avances.
El ministro de Educación, Joaquín Lavín, pidió discutir despolitizadamente las reformas para mejorar la educación chilena, después de los resultados obtenidos por los cuartos y octavos básicos en la prueba Simce.
"Se habla mucho del tema, de la defensa de la educación pública, pero en la realidad estos son los resultados. Entonces, pongámonos las pilas", dijo, detallando que esto significará nueva carrera docente, un nuevo modelo de administración, de colegios municipales.
"Si queremos de verdad mejorar la educación de los niños pobres vamos a tener que metemos en serio y de forma despolitizada en cada uno de esos temas", recalcó.
El secretario de Estado añadió que "sólo un reducido grupo de estudiantes logra el aprendizaje esperado, en cuarto y en octavo básico, y el problema más crítico de Chile está en la educación matemática, donde un 62 por ciento de los estudiantes de octavo básico no logra los aprendizajes que debería tener un niño de sexto básico".
Para lograrlo, el coordinador nacional de la prueba Simce, Juan Bravo, es vital la colaboración de la familia y que se avance, porque "hay factores que inciden en los buenos resultados que tiene que ver con cuestiones que para los colegios son útiles y para las familias también".
Entre ellas, citó Bravo, la ausencia a clases "porque si faltan a clases les va peor, y asimismo los profesores que todos estuviesen evaluados y ojalá de excelencia que pudieran mediar para que los estudiantes alcancen los aprendizajes esperados".
