Una joven educadora de párvulos, identificada como Gabriela Marín Mejías, se suicidó luego de conocer que el Tribunal de Garantía de San Fernando dejó en libertad a los tres acusados de ultrajarla sexualmente.
Según informó El Rancagüino On Line, el juzgado consideró que las pruebas presentadas por la Fiscalía y el reconocimiento de los atacantes por parte de la víctima, de 23 años, no eran suficientes para tomar dicha medida cautelar.
Gabriela Marín sufrió el violento ataque el pasado 7 de agosto, día en que fue abordada mientras caminaba por un sujeto con un arma cortante, quien la llevó hasta un sitio eriazo- en el que se encontraban dos antisociales más- donde se cometió el delito, informó el mismo portal.
La familia fustigó también al Hospital de San Fernando puesto que antes de cometer el suicidio la joven acudió al recinto asistencial pero no fue atentida por "falta de camas", situación que está siendo investigada por la dirección del recinto médico.
La versión de la Fiscalía
Ante las estimaciones del tribunal y conocido el deceso de la joven, el vocero de la Fiscalía Regional de O'Higgins, Octavio Rocco, señaló que "lamentamos profundamente la muerte de la víctima, compartimos con la familia el dolor" y anunció que se decidió cambiar al fiscal Carlos López, quien llevaba el caso, por la prosecutora de Rengo, Fabiola Echeverría.
Según El Tipógrafo, Rocco explicó que "para el Tribunal de San Fernando los antecedentes presentados, un reconocimiento de la víctima, no fue suficiente de modo este decreto la ilegalidad de la detención, consecuentemente no accedió a decretar las medidas cautelares solicitas por el fiscal en esa oportunidad".
Tras conocer la noticia, el diputado UDI Gonzalo Arenas criticó a través de Twitter los magistrados señalando que "estos son los 'campeones' de jueces que tenemos" e instó a leer la noticia del deceso de la joven parvularia.