La trágica jornada del 11-M en Madrid, cinco años después
El jueves 11 de marzo de 2004 cambió la vida de los españoles.
Atentados en Atocha acarreron consecuencias sociales y políticas.
El jueves 11 de marzo de 2004 cambió la vida de los españoles.
Atentados en Atocha acarreron consecuencias sociales y políticas.
Este miércoles se cumplen cinco años del atentado terrorista que causó la muerte de 191 personas, entre ellas el obrero chileno Héctor Figueroa Bravo, y dejó más de 2.000 heridos, luego una serie de ataques explosivos en trenes del servicio de cercanías en Madrid, España.
Se trató del mayor atentado en la historia de España, conocido como "11-M", donde 10 artefactos estallaron casi simultáneamente en cuatro trenes en las estaciones de Atocha, Santa Eugenia y el Pozo del Tío Raimundo.
Las explosiones ocurrieron entre las 07:36 y 07:40. |
Las primeras hipótesis hicieron pensar que se trataba de una acción del grupo terrorista ETA, pero los vascos negaron la autoría y algunas pruebas, como el tipo de explosivos y hallazgo de cintas con versos del Corán, indicaron que Al Qaeda podía estar detrás del hecho.
Al día siguiente 2,3 millones de personas manifestaron en las calles de Madrid su rechazo a los actos terroristas, gritando consignas como "todos viajábamos en ese tren", "¡ETA no!", "¡Al Qaeda no!" o "¡Asesinos, asesinos!". Se estima que un total de 14,1 millones de personas salieron a las calles en todo el país.
El 13 de marzo se capturó a los primeros sospechosos y se inició un largo periodo de investigación, donde se estableció como responsables del ataque a miembros de células o grupos terroristas de tipo yihadista.
Millones de españoles mostraron su repudio a la violencia. |
Voto castigo
La población española no tardó en culpar al presidente José María Aznar por involucrar al país en la guerra de Irak. Su partido, el Partido Popular (PP), perdió las elecciones del 14 de marzo, resultando vencedor el líder del PSOE (Partido Socialista Obrero Español) José Luis Rodríguez Zapatero, en lo que fue calificado como un "voto castigo".
Los responsables
A las pocas semanas la policía dio con miembros del comando terrorista que participó en el atentado, en la localidad de Leganés, pero al verse acorralados, se suicidaron haciendo estallar el lugar donde se encontraban.
El 10 de abril de 2006 el magistrado de la Audiencia Nacional, Juan del Olmo, concluyó que el atentado fue inspirado por Al Qaeda, pero no ejecutado por esa red, justificando la acción en la participación española en la Guerra de Irak.
En el auto de procesamiento se incluyó a 29 de los 116 imputados en la causa, enfrentando muchos de ellos cargos por 191 asesinatos terroristas, dos abortos, 1.755 asesinatos en grado de tentativa, cuatro delitos de estragos terroristas y por pertenencia a organización terrorista, entre otros.
Dos de los imputados, Jamal Zougam y Otman el Gnaoui, fueron responsabilizados como autores del ataque, siendo condenados a 42.917 años de prisión. José Emilio Suárez Trashorras fue acusado de "cooperador necesario" y recibió una condena de 34.715 años. El resto de los implicados fueron sentenciados a penas de entre dos y 18 años de cárcel.
Atocha hoy
En la estación de Atocha, hace dos años, se levantó un monumento a las víctimas, que recibió 550.000 vistas de marzo a diciembre de 2007, sobre todo durante los dos primeros meses que siguieron a su inauguración. En 2008, alrededor de 440.000 personas visitaron la obra.
El monumento, a un costado de la estación, recuerda a las víctimas del atentado. |
Laura Vega, que aquel día tenía 26 años y se dirigía a su trabajo cuando le alcanzó una de las explosiones, continúa ingresada en un centro asistencial en estado de coma. Otras 61 personas que resultaron heridas, aún necesitan atención médica.
Actualmente muchas víctimas se sienten abandonadas por las instituciones y acusan un lamentable olvido de la sociedad española. El olvido "sorprende y duele mucho", aseguró la vicepresidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza.
"Se ha pasado muy rápido del todos viajábamos en ese tren' a bajarse muy rápido" del mismo, según Pilar Manjón, la cara más conocida de las víctimas, que preside la Asociación 11-M Afectados por el Terrorismo.