Los restos de Kirchner fueron sepultados tras emotivo adiós en su ciudad natal
El ex mandatario fue inhumado en un mausoleo familiar en Río Gallegos.
Un multitudinario cortejo acompañó el féretro por la ciudad.
El ex mandatario fue inhumado en un mausoleo familiar en Río Gallegos.
Un multitudinario cortejo acompañó el féretro por la ciudad.
Río Gallegos, la ciudad sureña donde nació hace 60 años y en la que desarrolló su instinto de líder político, dio este viernes un conmovedor adiós al ex presidente argentino Néstor Kirchner y se comprometió a no olvidar a su hijo predilecto.
Los restos de Kirchner, quien gobernó Argentina desde 2003 a 2007, cuando traspasó el poder a su hoy viuda, la presidenta Cristina Fernández, llegaron a su ciudad natal en un avión procedente de Buenos Aires, donde fue despedido con un impresionante funeral de Estado en el que participaron decenas de miles de personas durante 26 horas.
Familiares, amigos, funcionarios y dirigentes políticos viajaron a Río Gallegos, adonde se desplazó también el mandatario venezolano, Hugo Chávez, uno de los ocho presidentes sudamericanos que asistieron al velatorio del cuerpo en la Casa Rosada, sede del gobierno.
El lento descenso del féretro desde el avión fue la antesala a una impactante caravana popular hasta el cementerio municipal, encabezada por la presidenta y sus hijos, Máximo y Florencia.
Multitudinario cortejo
El cortejo, que avanzó a paso de hombre, fue seguido por autos, motos y miles de personas apostadas a los costados de la autovía que enlaza el aeropuerto con el cementerio, en el mismo recorrido que realizó Kirchner en 2003 para celebrar su triunfo en las elecciones presidenciales.
Para los galleguenses, el ex presidente fue, además de político, un vecino, porque vivió durante más de 30 años en su ciudad natal y fue ahí donde empezó su carrera política, primero como alcalde (1987-1991) y después como gobernador de la provincia de Santa Cruz, entre 1991 y 2003, un cargo que lo catapultó a la Casa Rosada.
El cortejo fúnebre demoró cerca de tres horas en recorrer los 7 kilómetros que separan el aeropuerto del cementerio, abriéndose paso a duras penas entre la multitud, que traspasó los cordones de seguridad y provocó situaciones de tensión con la policía hasta que la propia Cristina Fernández pidió a los agentes que permitieran a la gente acercarse a la caravana fúnebre.
"Kirchner marcó a fuego a nuestra provincia", "Fuerza Cristina" rezaban muchos de los mensajes de apoyo que acompañaron el recorrido hasta el cementerio, impecablemente pintado.
Sólo familiares y el círculo íntimo del matrimonio presidencial accedió al camposanto para participar en el responso religioso que antecedió a la sepultura en un panteón familiar.
Néstor Kirchner murió este miércoles de un infarto masivo en el hospital José Formenti de la villa turística de El Calafate, situada a 300 kilómetros de Río Gallegos y en la que descansaba junto a su esposa.
El ex presidente había sufrido dos intervenciones coronarias en el último año: en febrero, por una obstrucción en la carótida derecha, y en septiembre, por un problema en la arteria coronaria que requirió una angioplastia.