El secretario ejecutivo de la Agencia Chilena del Espacio, Juan Fernando Acuña, comentó en El Diario de Cooperativa que el lugar exacto de la eventual caída de partes del satélite UARS de la NASA en las costas de Chile no se podrá determinar hasta "al menos tres hora antes" del impacto.
Acuña, quien estuvo en contacto con la agencia espacial estadounidense, señaló que "el monitoreo oficial de la NASA es a través del Comando Aéreo de la Fuerza Aérea de Estados Unidos y ellos son los que controlan cualquier vehículo hecho por el hombre que esté sobre la atmósfera o ingresando a la atmósfera".
Sólo ese organismo puede indicar el punto particular de llegada a la Tierra del aparato, pero "técnicamente es imposible saber exactemente dónde va a caer, (hasta) al menos tres hora antes aproximadamente de la caída del satélite".
"Lo único que se sabe, es que en la zona norte no estaría cayendo por la actitud que tiene hasta el momento", agregó.
"El satélite pesa casi seis toneladas, la mayor parte de eso se va a desintegrar en el reingreso a la atmósfera, de eso aproximadamente 500 kilos en pequeños fragmentos podría caer", aunque el experto advirtió que "desde la década de los 50 que no se tiene ningún antecedente de que estos ingresos de chatarra espacial haya afectado a alguien".
Aerospace Corporation, una empresa privada que realiza el seguimiento al satélite artificial de Investigación de la Alta Atmósfera (UARS), prevé que caerá en la costa de Chile este viernes a las 19:06 horas.