La bella atleta rusa se anotó un salto con garrocha de 5,01 metros, estableciendo una nueva plusmarca universal durante la final del Mundial que se diputa en la capital finlandesa.
La plusmarquista rusa Yelena Isinbayeva estableció este viernes un nuevo récord mundial de salto con garrocha al superar los 5,01 metros en el transcurso de la final de la especialidad en el Mundial de Atletismo de Helsinki 2005.
Isinbayeva mejoró en un centímetro su anterior plusmarca universal, que había conseguido en Londres el pasado día 22 de julio.
La bella rusa, campeona europea y olímpica, completó en Helsinki la triple corona ganando el título mundial y adornó su exhibición con el decimoctavo récord mundial de su carrera, tres semanas después de haberse convertido en la primera mujer que supera los cinco metros.
La final femenina del salto con garrocha, programada para el día martes 9 de agosto, fue retrasada para este viernes por culpa de la lluvia. El aplazamiento resultó providencial, porque el tiempo, infernal desde que empezó el Mundial, quiso sumarse al festival de Isinbayeva y se mostró benigno, sin lluvia ni viento.
La "reina de los cielos" empezó su concurso en 4,50, altura en la que tropiezan casi todas sus rivales. Pasó a la primera esa altura y también los 4,60. Cuando saltó 4,70, igualmente sin fallas, se había quedado sola. La polaca Monika Pyrek se había asegurado la plata con 4,60 y la checa Pavla Hamackova el bronce con 4,50.
Isinbayeva ordenó, entonces, que el listón se situara a 5,01 metros del suelo en busca de su récord mundial número 18 y los 100.000 dólares que conllevan. Falló a la primera, pero en su segundo salto voló majestuosamente sobre la barra y se dispuso a cumplir el trámite de posar junto al marcador que refleja el nuevo récord mundial.
En la última edición del Mundial (París 2003) Isinbayeva, con 21 años, sólo pudo ser tercera, pero desde entonces permanece invicta en alta competición y se fabricó una pequeña fortuna elevando el récord mundial en 17 etapas hasta esos cinco metros.
Isinbayeva consiguió el último de su récord mundial en Londres, el 22 de julio pasado, superando la barrera de los cinco metros al primer intento, y explicó por qué había dejado de ir centímetro a centímetro: "Era muy importante ser la primera que salta 5 metros. Me habría suicidado si se me anticipa otra. Ahora ya puedo volver a subir centímetro a centímetro". (EFE)
