Este viernes, después del Consejo de Gabinete en La Moneda, el Gobierno confirmó que la próxima semana será presentada la esperada reforma previsional.
"La próxima semana se va a presentar ante la ciudadanía. El Presidente se va a dirigir hacia los ciudadanos y ciudadanas de nuestro país para presentar la reforma previsional y, de acuerdo al funcionamiento del Congreso Nacional, a propósito de las semanas distritales legislativas, será su ingreso", dijo la ministra vocera, Camila Vallejo, en una rueda de prensa junto a sus pares Carolina Tohá (Interior), Jeannette Jara (Trabajo) y Mario Marcel (Hacienda).
El proyecto estaba listo para presentarse antes del pasado 4 de septiembre, sin embargo, y en una decisión de último minuto, el Ejecutivo decidió postergar aquello para después del plebiscito constitucional de salida, con el objetivo de separarla de la contingencia política que el país estaba atravesando.
Pese a que no se han dado a conocer públicamente los detalles más expecíficos de la reforma, los secretarios de Estado han mencionado algunos de los ejes más importantes que tendrá. Una de las claves es que apuntará a aumentar gradualmente la cotización en 6%, con cargo al empleador, desde el actual 10%.
El destino de ese 6% adicional y la gestión de los fondos de pensiones son los dos grandes temas que distancian la propuesta del Ejecutivo de los bloques opositores.
Al respecto, Vallejo llamó a la oposición "a conocer esta propuesta, a abrirse a los espacios de discusión, a no desaprovechar la oportunidad de tener un acuerdo en esta materia".
En referencia a las reformas de los gobiernos de Michelle Bachelet y Sebastián Piñera que nunca vieron la luz, la portavoz afirmó que "la tercera tiene que ser la vencida".
"Tenemos el deber y la responsabilidad las autoridades de Gobierno y parlamentarias, de responderle a la gente y darle certeza de que ya vamos a ser capaces de resolver esta deuda histórica que hay en materia previsional, no pensando solo en el futuro, sino que también en el presente de nuestros pensionados y pensionadas, que la están pasando mal", apuntó.
"UNA PROPUESTA ROBUSTA Y MODERADA"
La ministra Jara, a su vez, destacó que "el objetivo principal de esa reforma previsional es aumentar sustantivamente el monto de las pensiones, tanto de los actuales jubilados como de la generaciones que se va a jubilar próximamente, y romper con el extremo en que nos hemos encontrado durante 40 años, donde las personas han tenido que asumir el riesgo del envejecimiento individualmente".
Según la titular de Trabajo, la reforma es "una propuesta que es robusta técnicamente, que es moderada, porque lleva a Chile y lo saca del sistema de extremos en el que ha estado en estos 40 años y lo lleva al promedio de los países de la OCDE; y que además reconoce la necesidad de la existencia de un sistema mixto de pensiones, donde junto con el ahorro privado y la participación de privados en el sistema, exista además un pilar de la seguridad social público, solidario y que nos permita, en lo principal, mejorar pensiones". ´
Agregó que, si bien "la reforma y todos sus detalles van a ser presentadas prontamente, hemos comprometido un aumento en la Pensión Garantizada Universal (PGU) relacionado con la aprobación de la reforma tributaria, así como también un aumento de las pensiones de carácter contributiva; es decir, de aquellas a las cuales se le cotiza, con una nueva aportación que hará el empleador y que hoy día no existe en nuestro sistema".
Además, destacó que, una vez aprobada, la reforma va a "mejorar inmediatamente a lo menos a los dos millones actuales de jubilados que hoy día tienen pensiones que no les permiten vivir con tranquilidad".
"Un país que requiere mayor cohesión social, más justicia, y un ingreso más seguro para las personas mayores no puede darse el lujo de esperar 40 años para que las pensiones suban. De ahí la necesidad urgente, casi impostergable, de poder ponernos de acuerdo en una reforma que logre subir las pensiones para quienes están jubilados, y también para las próximas generaciones que se jubilen", remarcó la ministra Jara.
Su par de Hacienda, en tanto, enfatizó que "cuando hablamos de un sistema mixto de lo que estamos hablando de un sistema al cual contribuyen todos los actores del sistema: el Estado, los empleadores y los trabajadores; que está compuesto de distintos pilares que complementan el aporte del Estado, un beneficio básico, con los ahorros de los trabajadores y con un mecanismo de seguridad social y, sobre todo, que es un sistema que va a beneficiar a todos los pensiones: actuales y los futuros. Ningún trabajador o trabajadora va a quedar peor con esta reforma".
OPOSICIÓN ADVIERTE "DUREZA" CONTRA UN 6% ÍNTEGRAMENTE SOLIDARIO
Desde la derecha, el diputado Frank Sauerbaum (Renovación Nacional), integrante de la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja, advirtió que "vamos a defender tres principios básicos: la propiedad de los fondos, la posibilidad de que éstos sean heredables y la posibilidad de elegir entre un sistema privado y uno público".
"Además, le hemos dicho (al Gobierno) que el 6% de cotización adicional pagado con costos al empleador, no puede ir a un fondo solidario en su totalidad, porque creemos que perjudica al trabajador en el largo plazo", insistió.
A su juicio, "el Gobierno comete un error al insistir (sobre ello), porque -advirtió- se va enfrentar con una oposición dura y también la ciudadanía quiere que vaya a sus fondos de capitalización individual".
En tanto, en El Primer Café de Cooperativa, la diputada de Convergencia Social Gael Yeomans, también miembro de la comisión, consideró "preocupante que algunas fuerzas políticas de oposición estén fijando posturas contrarias a la reforma de antemano, por ejemplo, respecto de introducir solidaridad al sistema a través de la cotización del 6% a cargo del empleador, sin que hayamos siquiera dado la discusión, sin que siquiera haya ingresado la reforma".
"Por otra parte, tampoco se dan muestras de querer cambiar en algo el sistema contributivo. Eso demuestra que, lamentablemente, no hay disposición al diálogo", reprochó la parlamentaria oficialista, para quien la postura de la derecha "no es una buena noticia para la ciudadanía".
FALTA MAYORÍA EN EL CONGRESO
De todos modos, como el Gobierno y el oficialismo no cuentan con una mayoría total en el Congreso, se espera que eventualmente tendrá que ceder sobre algunos planteamientos para hacer viable la futura reforma de pensiones.
"Tengo la impresión de que no están las fuerzas políticas ni los votos para alcanzar ese objetivo y, por tanto, lo más probable es que se busque una fórmula mixta", apuntó el diputado socialista Jaime Naranjo. "Lo que no nos puede pasar en el parlamento es que por ser intransigente el día de mañana no tengamos reforma de pensiones ni tributaria", advirtió.
Por su parte, el senador UDI Juan Antonio Coloma sostuvo que "se puede llegar a acuerdo, pero siempre que el Gobierno considere que nuestra prioridad y de los chilenos es que la mayoría de esos fondos vayan a las cuentas individuales, sean propios y heredables. ¿Se puede hacer una mezcla? Veremos qué se propone".