Una decena de artistas se presentó de manera gratuita a lo largo de seis horas.
El evento también reivindicó las luchas del pueblo mapuche y de los habitantes de Freirina.
Con más de una decena de artistas, éxito de convocatoria y altas temperaturas, se realizó ayer domingo el acto político cultural "Juntos desenchufemos Hidroaysén", convocado por el Consejo de Defensa de la Patagonia (CDP).
Hasta el frontis del Museo de Bellas Artes llegaron más de 10 mil personas -según estimaciones de la producción- para ver gratuitamente a músicos nacionales como Joe Vasconcellos, Kaskivano y Manuel García, además de escuchar los distintos discursos, que abordaron también otros temas, como la situación de los pueblo mapuche y palestino, y la situación que se vive en Freirina.
El coordinador internacional del CDP, Juan Pablo Orrego (ex miembro del grupo Los Blops), resaltó a Cooperativa la recepción que tuvo el evento.
"Al final los números ni siquiera importan tanto, pero había aquí una masa humana cálida, poderosa. Ha sido una jornada que es imposible que sea más exitosa. Son tiempos difíciles, hay muchos conflictos socioambientales en Chile, hay muchos problemas y la gente está acogotada por todos lados", dijo Orrego.
Contra los "oídos sordos"
Para Joe Vasconcellos, en tanto, la riqueza del acto estuvo en la amplitud de los temas evidenciados por las vocerías y los músicos: "'Patagonia sin represas' convoca muchas cosas, porque en Chile ocurren muchas situaciones, pero lamentablemente Santiago, este pequeño gran hoyo negro, se come todo y no mira para el lado", dijo.
"Chile es un país hermoso y ojalá no terminemos un día viviendo, como en la Franja de Gaza, todos en Santiago, porque el resto del país se ha vuelto invivible (sic)", expresó.
Al bajar del escenario dispuesto en el corazón del Parque Forestal, el vocalista de Villa Cariño, Max Vivar, destacó que las demandas de las personas cobran una mayor potencia al ver que las autoridades las ignoran.
"En este Gobierno han hecho oídos sordos. Lo que ellos provocan es esto: fervor social. Provocan que la gente, que nosotros sintamos el derecho de ir a reclamar, a protestar. Por eso yo nunca ataco a los chiquillos cuando salen a tirar piedras, porque encuentro que esa es la rabia que genera el Estado que no escucha", indicó el músico.
Expresarse y cumplir un rol
Más allá de la variedad de inquietudes sociales que existen, para Manuel García lo importante es que aquéllas la gente quiere manifestarlas.
"Más allá de las categorías y de las nomenclaturas de los actos, lo que importa es que la gente chilena tiene ganas de expresarse, de decir y subrayar ciertos temas. Por eso estamos acá", declaró el intérprete de "El viejo comunista".
Por su parte, María Fernanda Carrasco, voz de La Mano Ajena, puso foco en el rol social que cumplen los artistas.
"Chile no es de Chile y eso es muy heavy, porque es lo que se exporta como progreso. Es como que nosotros (quienes protestamos) somos los bichos raros", reflexioó.
En tal sentido, "creo que todos los que tenemos un rato de escenario, de audiencia o de que alguien te escuche, uno tiene que utilizarlo para lo que uno cree que es importante y que es trascendente", dijo la cantante.
El evento concluyó sin mayores incidentes frente al Museo de Bellas Artes alrededor de las 21:00 horas, con un cierre comandado por la rapera nacional nominada al Grammy, Ana Tijoux.
