La actriz había asegurado que el movimiento feminista hacía ver "débiles" a las mujeres.
No tardó ni siquiera una semana en verse obligada a pedir disculpas por sus polémicos dichos sobre el movimiento #MeToo. La actriz Lindsay Lohan salió a retractarse luego de que en una entrevista sostuvo que "lo que pienso sobre las mujeres que hablan contra todas estas cosas es que las hace lucir débiles, cuando en realidad son mujeres muy fuertes".
Lohan se refirió a sus palabras a través de una declaración enviada a la revista People, donde sostuvo que "me gustaría pedir disculpas sin reserva alguna por cualquier daño y angustia provocada por una cita en una entrevista reciente con The Times".
El texto continúa apuntando que "la cuña está relacionada solamente con mi esperanza de que un puñado de falsos testimonios entre el tsunami de voces heroicas no sirvan para diluir la importancia del movimiento #MeToo y de todos quienes lo motivamos".
"Sin embargo, he aprendido que declaraciones como las mías son vistas como dañinas, algo que nunca fue mi intención. Me disculpo por cualquier dolor que haya podido provocar".
"Me preocupa bastante el movimiento #MeToo y tengo el respeto más incondicional y admiración por las mujeres lo suficientemente valientes como para salir adelanto y hablar sobre sus experiencias. Su testimonios han servido para proteger a aquellas que no pueden hablar y darle fuerzas a aquellas que han luchado para que sus voces se escuchen", añadió.
En la misma entrevista, Lindsay Lohan volvió a defender a Harvey Weinstein, a quien ya había apoyado públicamente antes.
