Tres de cada cuatro argentinos opina que la situación seguirá igual o empeorará.
Pesimismo se concentra en ancianos y en sectores con mayor educación.
El sondeo fue realizado tras la brusca devaluación del peso en la segunda mitad de enero de 2014.
La escalada inflacionaria que ha afectado al país trasandino ha puesto en conflicto a la economía del país, y junto a esto el pesimismo de la población a que este fenómeno se revierta.
Así lo demostró un sondeo presentado este domingo donde se afirma que el 84 por ciento de los argentinos duda que el gobierno de Cristina Fernández consiga frenar los índices de inflación en los próximos meses, ya que considera que los precios seguirán aumentando durante todo 2014, frente al 77 por ciento que opinaba igual en el mismo período en 2013.
El último Índice General de Expectativas Económicas de la Universidad Católica Argentina y TNS-Gallup, realizado tras la brusca devaluación del peso en la segunda mitad de enero, reveló un aumento generalizado del pesimismo sobre la situación económica de Argentina.
Uno de cada dos argentinos cree que la economía argentina está "mal o muy mal" y tres de cada cuatro opina que en los próximos seis meses la situación seguirá igual o empeorará, de acuerdo lo publicado por el diario bonaerense La Nación.
Los datos suponen un retroceso del 10,3 por ciento sobre la percepción del contexto económico actual y del 10,5 por ciento sobre las expectativas futuras respecto a los datos de enero de 2013.
El pesimismo es especialmente elevado entre los adultos mayores, donde llega al 55 por ciento y también entre los sectores con mayor educación, del 55 por ciento entre los universitarios y del 54 por ciento entre los que completaron sus estudios secundarios.
La encuesta se realizó a 1.012 personas de 18 y más años en todo el territorio nacional entre el 17 y el 25 de enero.
