Diversas organizaciones sociales y de apoyo a mujeres se manifestaron este lunes después de que un hospital de un municipio de la provincia de Buenos Aires se negara a practicar un aborto a una menor que fue violada por su padrastro, alegando "riesgo para la vida de la niña".
Los manifestantes, entre ellos miembros de la Mesa por el Aborto Legal y de la asociación Mujeres al Pie del Cañón, expresaron su respaldo a la familia y prometieron que se quedarían concentrados delante del centro médico hasta que se realizara el aborto.
La menor, de 13 años, denunció las violaciones hace un mes, según explicaron fuentes del Ministerio de Justicia argentino, tras lo cual pidió cita para una ecografía, que fue finalmente practicada el pasado sábado y en la que se confirmó el embarazo.
Sin embargo, los médicos del hospital Mariano y Luciano de la Vega, del municipio bonaerense de Moreno, se negaron a practicar el aborto alegando "riesgo para la vida de la menor", ya que el embarazo había alcanzado la semana 23.
De acuerdo con la ley argentina, el aborto puede realizarse sin castigo penal en caso de peligro para la vida de la madre o de violación y siguiendo las directrices de la Organización Mundial de la Salud" (OMS), que recomiendan limitar los abortos hasta la semana 22 de gestación.
La directora asociada del hospital, Mariana Dunayevich, afirmó que un aborto en esas condiciones aumentaría "significativamente" el riesgo de una "hemorragia posparto con riesgo de muerte" y pondría en riesgo su capacidad reproductiva en el futuro.
Sin embargo, en declaraciones a medios locales, la abogada Nina Brugo, miembro de la Campaña Nacional por la Despenalización del Aborto, rechazó que el Código Penal limite expresamente el aborto exactamente hasta las 22 semanas.
En Argentina se registran alrededor de 500.000 abortos cada año, según estimaciones oficiales.