Suu Kyi ha pasado 13 años bajo arresto domiciliario.
El mandatario estadounidense cuestionó la disposición de Birmania de ser parte de la comunidad internacional.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha pedido a la Junta Militar de Birmania (Myanmar) la liberación "inmediata e incondicional" de la líder opositora y Nobel de la Paz, Aung San Suu Kyi, quien se ha pasado 13 de los últimos 19 años bajo arresto domiciliario.
"Condeno con fuerza su arresto domiciliario y detención, que también han sido condenados por todo el mundo", dijo Obama en un comunicado que ha publicado este miércoles en su página web la Embajada de Estados Unidos en Bangkok.
Obama recuerda al régimen birmano que, según la ONU, la detención de Suu Kyi "es arbitraria, injustificada y contraria a la propia ley de Birmania".
"La detención, aislamiento y juicio de Suu Kyi, mediante cargos falsos, arrojan serias dudas sobre la disposición del régimen birmano para ser un miembro responsable de la comunidad internacional", prosiguió el mandatario estadounidense.
Añadió que Birmania tiene una oportunidad importante para trabajar en favor de la reconciliación y restablecer el diálogo con la oposición democrática.
El llamado de Obama se produce cuando el juicio contra Suu Kyi por violar las condiciones de su arresto domiciliario entró esta jornada en la octava sesión de la vista oral, que de nuevo se celebra a puerta cerrada en el tribunal especial presidido por dos jueces militares y montado en el presidio de Insein, cerca de Rangún.
El Gobierno birmano levantó el martes el arresto domiciliario que impuso a la opositora en 2003, pero la mantiene presa en Insein a causa de los cargos que le imputan y que se castigan con una pena máxima de cinco años de cárcel.
Birmania está gobernada por los militares desde el golpe de Estado del general Ne Win en 1962.
