El ex presidente de Petrobras acusa su responsabilidad en caso de 2006.
Rousseff lideraba Consejo de Administración de Petrobras en polémica compra de refinería estadounidense.
La investigación parlamentaria puede afectar en pleno año electoral a Rousseff.
El ex presidente de la petrolera estatal brasileña Petrobras, José Sergio Gabrielli, afirmó que la mandataria Dilma Rousseff también es responsable de la decisión de la compañía de comprar una refinería en Estados Unidos en 2006, un negocio investigado por posibles irregularidades, informó hoy la prensa.
En una entrevista al diario O Estado de Sao Paulo, Gabrielli indicó que tanto él como la actual gobernante, quien en la época era presidenta del Consejo de Administración de Petrobras en calidad de ministra jefa de la Casa Civil (Presidencia), tienen responsabilidad.
"Yo soy responsable. Era el presidente de la empresa y no puedo huir de mi responsabilidad, del mismo modo que la presidenta Dilma no puede escapar de la responsabilidad de ella, que era presidenta del Consejo. Somos responsables de nuestros actos, pero es legítimo que ella ahora dude", apuntó Gabrielli.
La compra de la refinería Pasadena, en Texas, es investigada por la Policía Federal, el Tribunal de Cuentas de la Unión y el Ministerio Público, por lo que los partidos de la oposición al Gobierno de Rousseff realizan gestiones para instaurar una comisión parlamentaria con amplios poderes para investigar el negocio.
De acuerdo con documentos filtrados por la prensa, en 2006 Petrobras pagó 360 millones de dólares por la compra de la mitad del capital de la refinería, que un año antes había sido adquirida en su totalidad por apenas 42,5 millones de dólares por la firma belga Astra Oil.
Además fue forzada a desembolsar otros 820 millones de dólares para comprar la otra mitad a Astra Oil debido a una cláusula en el contrato que obligaba a la brasileña a adquirir el otro 50 por ciento en caso de divergencias entre los socios.
