El renunciado personero dijo que todos los miembros de la dirección del partido gobernante en Brasil sabían sobre las irregularidades financieras, salvo el presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
El ex secretario del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) Silvio Pereira dijo que todos los dirigentes de la formación del presidente Luiz Inácio Lula da Silva estaban al tanto de las irregularidades que lo obligaron a renunciar al cargo y generaron el escándalo de corrupción que sacude a Brasil.
En una entrevista publicada este domingo por el diario Folha de Sao Paulo, Pereira, un antiguo colaborador del gobernante, afirmó que toda la dirección nacional del partido sabía que la formación utilizaba una contabilidad paralela en sus campañas electorales.
"Nadie es tan hipócrita como para decir que no sabía que existía una contabilidad paralela. ¿Qué miembro de la dirección del PT no sabía?", afirmó el ex secretario de la formación socialista en sus declaraciones al diario paulista.
Según Pereira, los 21 miembros de la dirección nacional del partido, incluido su ex presidente José Genoino, estaban al tanto de que muchos de los recursos utilizados para financiar las campañas electorales nunca fueron declarados ni a las autoridades electorales ni a las fiscales.
El ex secretario sólo excluyó de sus acusaciones a Lula, de quien dijo que nunca se envolvía en las decisiones del partido, y al ex poderoso ministro de la Presidencia José Dirceu, quien supuestamente ya se había alejado de la dirección de la agrupación política cuando ocurrieron las irregularidades.
Las acusaciones de irregularidades contra dirigentes del partido oficialista generaron la mayor crisis política desde que Lula asumió la Presidencia, en enero de 2003, e incluso desde el escándalo que obligó al entonces gobernante Fernando Collor a renunciar a su mandato en 1992.
El escándalo le costó el cargo a Dirceu, considerado la mano derecha del presidente y que durante lustros comandó el PT con mano de hierro, y a los principales dirigentes de partido que Lula fundó en 1980 y que lo condujo al poder.
La crisis también tiene en el banquillo a 17 diputados, acusados de beneficiarse de los recursos no declarados por el PT y que son investigados y pueden ser sancionados con la pérdida del mandato.
Según las acusaciones, los recursos no declarados por el partido fueron utilizados para pagar sobornos a congresistas de otras formaciones y alimentar paraísos fiscales en el exterior.
El PT afirma que el dinero no declarado fue producto de préstamos bancarios por cerca de 56 millones de reales (unos 24,9 millones de dólares), pero los congresistas que investigan las acusaciones sospechan que tales recursos fueron desviados de empresas estatales o fruto de otros actos de corrupción.
Entre los miembros de la dirección del partido que Pereira compromete con sus declaraciones, figura el senador Delcidio Amaral, presidente de una de las comisiones legislativas que investiga el escándalo de corrupción.
Igualmente figura la ex alcaldesa de Sao Paulo Marta Suplicy, una de las principales figuras de la formación.
Según el ex secretario del PT, Delubio Soares, ex tesorero del partido y responsable por la contabilidad paralela, era asediado por todos los dirigentes regionales de la formación que le pedían dinero para sus campañas electorales.
"Los dirigentes de los 27 estados acudieron a Delubio Soares para buscar recursos ¿Por qué ellos no asumen eso? Todo el mundo le pedía dinero a Delubio Soares y apenas él asumió la culpa por las irregularidades", afirmó. (EFE)
