Wayne Smith fue uno de los invitados a la reapertura de la embajada de Cuba en Washington.
Desde que salió de La Habana estuvo abogando por el restablecimiento de las relaciones diplomáticas.
"Creía que la política del embargo, de negarnos a tener un diálogo, era completamente contraproducente", afirmó.
Wayne Smith, uno de los diplomáticos estadounidenses que vieron el cierre de la embajada en Cuba en 1961, se pasó el resto de su carrera abogando por el diálogo entre los dos países y hoy vio cumplido su sueño de deshielo al contemplar cómo se alzaba la bandera cubana en el cielo de Washington.
"No puedo estar más contento, después de tantos años", dijo a EFE Smith, mientras disfrutaba de un mojito cerca del bar "Ernest Hemingway", ubicado en el segundo piso de la nueva embajada cubana en Washington.
El diplomático, de 83 años, fue jefe de la Sección de Intereses estadounidense en La Habana entre 1979 y 1982, y a lo largo de su carrera ha denunciado el embargo impuesto a la isla y la falta de relaciones bilaterales como una estrategia errónea.
Por eso, hoy fue uno de los 500 invitados por el Gobierno de Cuba a la apertura de la embajada cubana, la misma que se cerró en 1961 al tiempo que Smith y otros tantos diplomáticos estadounidenses abandonaban La Habana tras la ruptura de relaciones ese año.
"Siempre he estado convencido de que podíamos lograr mucho más a través de las relaciones que a través del aislamiento, a través de negarse a hablar", aseguró a EFE.
"Creía que la política del embargo, de negarnos a tener un diálogo, era completamente contraproducente. Podíamos alcanzar mucho más con relaciones diplomáticas, y después de 50 años, todavía creo lo mismo", añadió.
Otros presentes en la ceremonia
A la ceremonia en la embajada de Cuba en Washington acudieron artistas como el cantautor Silvio Rodríguez o el actor Danny Glover, y legisladores como el congresista demócrata Raúl Grijalva o el senador republicano Jeff Flake, entre otros.
Dentro de los eventos de la jornada, el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, se reunió en la sede del Departamento de Estado con el canciller cubano, Bruno Rodríguez.
Previamente a la visita del canciller Rodríguez al Departamento de Estado, la primera de un responsable de la diplomacia cubana en esa sede desde la ruptura de relaciones, en 1961, hoy tuvo lugar la colocación de la bandera cubana, junto a las del resto de países con los que EE.UU. tiene relaciones, en el salón de entrada de dicha institución.
