Según los afectados, el individuo, recluido hace años, les envió cartas en las que detalla cómo piensa matarlos y desmembrarlos, como hizo décadas atrás con su novia.
Un periodista del diario Sydsvenskan y dos profesores de la Universidad de Lund, denunciaron a la policía sueca haber recibido una carta anónima en la que son amenazados indirectamente con ser devorados.
La autoría de las cartas se atribuye a un caníbal de la ciudad sueca de Malmö, detenido hace 27 años por comerse a su novia.
En las cartas, idénticas y recibidas poco antes de Navidad, aparecen dibujadas hachas y cuchillos, acompañados por dos leyendas en latín: "No soy un ser humano" y "Ningún paso atrás".
Según Anders Piltz, uno de los profesores de Lund afectados, esta última cita aparece en una fábula del clásico romano Horacio sobre el león que se hace el enfermo para atraer al zorro a su cueva y devorarlo.
Los profesores amenazados impartieron clases al caníbal, ahora de 57 años, cuando éste estudiaba Lenguas Clásicas en la pequeña localidad universitaria situada al sur de Suecia, a fines de 1970, donde coincidió como alumno con otra mujer que también recibió ahora una carta.
No es la primera vez que el caníbal les envía misivas en los últimos 15 años: hace dos, a uno de ellos le llegó una que incluía una descripción minuciosa de cómo iba a ser asesinado y cortado.
"Estoy seguro al cien por cien de que es él. Ninguno de nosotros teme por sus vidas, pero ya ha matado y comido a una persona, así que tampoco se puede excluir completamente que lo pueda hacer de nuevo", confesó Piltz a Sydsvenskan Piltz.
Joakim Palmkvist, periodista del citado diario, tampoco tiene dudas de la autoría de la carta y de su significado.
"La entendí como una amenaza de muerte contra mi persona. Y el año pasado sólo escribí sobre alguien que fuera versado en lenguas clásicas", declaró en referencia al caníbal.
Palmkvist publicó el pasado noviembre un artículo donde revelaba que un tribunal había autorizado al caníbal, encerrado en una clínica siquiátrica desde 1980, a dormir varias noches a la semana en su departamento de Malmö.
Esto, a pesar de que se le ha diagnosticado esquizofrenia, además del síndrome de Asperger, un trastorno del desarrollo o espectro autista y a que los médicos lo consideraban todavía peligroso.
El "caníbal de Malmö" saltó a la fama en enero de 1980, cuando la policía lo detuvo por el robo de unos libros en la biblioteca pública.
Durante un registro en su casa, los agentes encontraron varios paquetes de carne en el refrigerador que desprendían un desagradable olor y que luego se demostró que eran restos humanos.
El hombre acabó reconociendo que se trataba de los restos de su novia, desaparecida el año anterior, a quien había esposado y ahogado en la bañera porque decía estar cansado de sus quejas.
En su diario personal, el individuo relataba con detalle cómo la fraccionó y cómo empaquetó en plástico los distintos pedazos, la mayoría de los cuales arrojó a las aguas del puerto de Malmö. (EFE)
