Entre el 70 y el 80 por ciento de decesos están relacionados con estos males.
Ese tipo de enfermedades, que requieren costosos tratamientos, "están aumentando de manera exponencial".
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (Unrwa) expresó este viernes su preocupación por la creciente extensión de las enfermedades no transmisibles y de tratamiento costoso, como el cáncer, la diabetes o la hipertensión, en los territorios palestinos.
"En mortalidad materna e infantil la situación ha mejorado, la cobertura de vacunación es de casi el 100 por ciento, pero las enfermedades no transmisibles asociadas al estilo de vida se han convertido en un problema", dijo el director de salud de la Unrwa, Akihiro Seita, al presentar el informe anual de su organismo en esta materia.
Sostuvo que entre el 70 y el 80 por ciento de decesos de refugiados en los territorios ocupados están relacionados con casos de cáncer, diabetes, hipertensión y tabaquismo. Ese tipo de enfermedades, que requieren costosos tratamientos, "están aumentando de manera exponencial", subrayó.
Por ello, explicó que "la Unrwa se ve en la imposibilidad de mantener niveles adecuados de atención médica" entre los palestinos, tanto en los territorios ocupados por Israel, como en los países de Oriente Medio donde viven un total de 5 millones de refugiados.
En el Líbano, el organismo de la ONU tiene registrados a 455.000 palestinos refugiados, de los que la mitad residen en campamentos y, de manera general, viven en una situación de exclusión al estarles prohibido ejercer unas 30 profesiones y acceder a la propiedad. Además, sólo el 37 por ciento de los que están en edad de trabajar tienen un empleo y el 66 por ciento vive en condiciones de pobreza.
En Siria, los refugiados palestinos son casi medio millón, mientras que en Jordania llegan a los dos millones. En ambos países se les reconocen derechos similares a los que tienen los nacionales.
