Abogado del procesado ex gobernante sostuvo que éste se ha resentido de las largas horas que permanece sentado durante el juicio oral al que es sometido por violaciones a los derechos humanos.
El procesado ex presidente peruano Alberto Fujimori será sometido en los próximos días a exámenes médicos en un hospital de Lima, debido a un fuerte dolor en la espalda, anunció este lunes su abogado, César Nakasaki.
El letrado afirmó a los periodistas que Fujimori sufre de "edemas y fuerte dolor de espalda", causados aparentemente por las largas horas que permanece sentado durante el proceso oral al que se le somete por violaciones a los derechos humanos.
Agregó que el ex gobernante (1990-2000) fue revisado la mañana de este lunes por un médico en el cuartel policial en el que está detenido y se solicitó al tribunal que lo juzga, presidido por el vocal César San Martín, que le permita exámenes más exhaustivos en un hospital capitalino.
"Tenemos que coordinar que los exámenes clínicos no interfieran en el juicio, el doctor San Martín ha tomado la prevención de esto, pero si el cuadro médico lo exige, vamos a someterlo de inmediato", adelantó Nakasaki.
Las audiencias del proceso a Fujimori se celebran de manera regular los lunes, miércoles y viernes de cada semana, por lo que el tribunal estudia dar la autorización para que el traslado se haga un martes o jueves.
Durante la jornada de este lunes, el ex militar Ángel Pino, acusado de pertenecer al grupo militar encubierto Colina, declaró que miembros de ese destacamento lo conminaron a culpar a Fujimori por las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta.
En su declaración, Pino señaló que mientras se encontraba preso, el suboficial Julio Chuqui, miembro de Colina y testigo contra Fujimori, lo instó a acusarlo de tener responsabilidad en ambas matanzas a cambio de recibir una reducción en su condena.
El testigo afirmó que él nunca perteneció a Colina y que tampoco conoció a Santiago Martin Rivas, jefe de este grupo militar clandestino y a quien todos los testigos vinculan como autor directo de las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, donde murieron 25 personas.
Nakasaki dijo, al respecto, que la declaración de Pino señala que "hay indicios de irregularidad en varias de las colaboraciones eficaces" -favores judiciales a cambio de confesión- que se han otorgado a los miembros de Colina.
El abogado admitió que "evidentemente hubo un destacamento de inteligencia y miembros de ese destacamento cometieron matanzas", en referencia al grupo encubierto.
Pero aseguró que, en su opinión, no existe ninguna evidencia de que Fujimori "haya tenido que ver" con el funcionamiento de ese grupo.
Según lo previsto por el tribunal, en las siguientes audiencias acudirán como testigos los considerados jefes operativos de Colina, Martin Rivas y Carlos Pichilingüe, así como ex altos mandos de los servicios de inteligencia y del Ejército. (EFE)
