Manifestantes exigen la renuncia de la presidenta Dina Boluarte y el cierre del Congreso.
Los cortes de tránsito se concentran en las regiones sureñas.
Las protestas antigubernamentales convocadas para este miércoles en Perú tuvieron sus primeros incidentes con el bloqueo de siete carreteras del interior del país y un breve enfrentamiento entre manifestantes y agentes de la Policía Nacional (PNP) en la ciudad surandina de Huancavelica, según los reportes oficiales.
El "mapa interactivo de alertas" de la Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran) indicó que los puntos de tránsito interrumpido se encuentran en carreteras de las regiones sureñas de Arequipa y Cusco, así como en la amazónica de Loreto.
Por otra parte, el único incidente violento de la mañana se produjo en Huancavelica, una ciudad a 426 kilómetros al sur de Lima, donde desconocidos prendieron fuego a la puerta de la sede de la Prefectura, ubicada en la plaza de Armas.
Ante esta situación, agentes antidisturbios lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a cientos de manifestantes, que rápidamente dejaron la zona, y controlaron el fuego, que causó daños menores.
Al respecto, el primer ministro, Alberto Otárola, declaró en el Palacio de Gobierno de Lima que el Ejecutivo reitera su "llamado a la calma, a la paz" a los manifestantes.
Otárola confirmó que en algunas regiones del país se presentaron marchas pacíficas y solo en Huancavelica hubo un enfrentamiento "que ya ha sido controlado por la Policía".
El ministro del Interior, Vicente Romero, añadió que se realizaron "movilizaciones y protestas" pacíficas y que la Policía "está dando las garantías necesarias, como corresponde".
"En Huancavelica hubo un intento de incendiar la Prefectura pero la Policía tuvo que hacer uso de gases lacrimógenos", acotó antes de invocar a los manifestantes a "que se abstengan de hacer daño a la propiedad pública y privada".
Romero dijo que "hasta el momento felizmente no ha habido ninguna agresión" hacia los agentes o personas que no participan en la protesta y ratificó que "la seguridad está garantizada".
Horas antes, el ministro informó que en Lima se están usando más de 7.000 cámaras para vigilar las principales zonas del centro histórico lo que, según dijo, "da la posibilidad de ver cómo va el desenvolvimiento de estas manifestaciones y le permite a la Policía Nacional tomar decisiones".
"Los protocolos de la Policía Nacional están perfectamente enclavados en el respeto de los derechos humanos", sostuvo antes de decir que también se han tomado en cuenta las recomendaciones de organismos internacionales.
La jornada de protestas ha sido convocada en Perú por organizaciones sociales, sindicales y políticas que reclaman la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, el cierre del Congreso y la convocatoria a elecciones generales y a una Asamblea Constituyente.
Durante la mañana, pequeños grupos de personas recorrieron de manera pacífica el centro de Lima, sin que se produjeran incidentes, y las actividades continuaron con normalidad, a la espera de que se desarrolle una marcha masiva que debe comenzar alrededor de las 17.00 horas (18.00 de Chile).
