El primer ministro británico llamó a convertir esta conferencia en el "principio del fin" de la lucha contra el cambio climático.
El príncipe Carlos llamó a ponerse "en pie de guerra" ya que considera al calentamiento global como "una amenaza existencial".
El primer ministro británico, Boris Johnson, inauguró este lunes la cumbre de líderes de la COP26 en Glasgow, Escocia, con un llamado a convertir la conferencia en el "principio del fin" de la lucha contra el cambio climático.
Lo anterior, con el objetivo de que las futuras generaciones sufran en menor nivel las consecuencias del calentamiento global.
"Si fracasamos, nuestros hijos no nos perdonarán. Nos juzgarán con amargura, y tendrán razón", dijo Johnson a los 120 jefes de Estado y Gobierno que se encuentran reunidos este lunes y el martes en la cumbre del clima de la ONU.
La instancia se extenderá hasta el 12 de noviembre y arrancó el pasado domingo con discursos de la ministra chilena del Medioambiente y ex presidenta de la COP25, Carolina Schmidt, y de Alok Sharma, quien preside la conferencia durante esta oportunidad, afirmando que esta es "la última esperanza" para conservar el objetivo de mantener el calentamiento global en 1,5ºC.
El heredero al trono británico, el príncipe Carlos, instó al mundo a ponerse "en pie de guerra" para enfrentar la emergencia climática.
En un discurso a los delegados, Carlos, que siempre ha estado interesado en la protección de la naturaleza, dijo que el calentamiento global significa "una amenaza existencial", mayor de lo que es la pandemia del Covid-19.
El primogénito de Isabel II propuso impulsar una campaña "de estilo militar" para canalizar "la fuerza del sector privado global", con "billones a su disposición".
Así, afirmó que "la única posibilidad real de conseguir una verdadera transición económica" son con los aportes que puedan ofrecer las empresas, las que mueven más capital que los gobiernos.
También advirtió que muchos países no podrán realizar la innovación necesaria para fomentar la economía verde, incluidos los que cargan con mucha deuda.
"La escala y el alcance de la amenaza que afrontamos llama a crear una solución global basada en transformar radicalmente nuestra economía fundamentada en los hidrocarburos a otra que sea auténticamente renovable y sostenible", declaró.
Por último, el príncipe pidió a los Estados "unirse para crear un ambiente que permita a todos los sectores industriales tomar las medidas necesarias".
