Tom Tancredo dijo que no es parte del trabajo de Benedicto XVI involucrarse en la política estadounidense, en referencia al llamado del pontífice para dar un trato humano a los inmigrantes.
El legislador republicano Tom Tancredo, conocido por su mano dura contra la inmigración ilegal en EE.UU., criticó este jueves la intromisión del Papa Benedicto XVI en la política migratoria del país.
"No estoy criticando la autoridad moral del Papa y respeto sus puntos de vista sobre las amenazas de la inmigración islámica. Sin embargo, no es parte de su trabajo involucrarse en la política estadounidense", dijo Tancredo en un comunicado.
Durante sus tres días de gira por Washington, el Papa dedicó una atención especial al tema migratorio en EE.UU. y este jueves, durante una misa en un estadio de béisbol ante 46.000 fieles, destacó las contribuciones de los inmigrantes latinoamericanos al crecimiento de
la Iglesia Católica en este país.
En un comunicado conjunto del Vaticano y la Casa Blanca, tanto el presidente George W. Bush como el papa Joseph Ratzinger abordaron la necesidad de una "política coordinada" con respecto a la inmigración, en particular "el trato humano a los inmigrantes y el
bienestar de sus familias".
Pero Tancredo criticó el llamado que hizo el Papa a un trato digno de los inmigrantes, al afirmar en un comunicado que la política migratoria de EE.UU., lejos de ser "violenta", es "poco estricta".
"No veo de qué forma puede ser violento o denigrante el aceptar a más refugiados que cualquier otra nación, y darles cuidado de salud gratuito, educación, vivienda y beneficios de servicio social a millones de inmigrantes indocumentados", sostuvo Tancredo, un
descendiente de inmigrantes italianos.
Según datos oficiales, más de 30 millones, el 45 por ciento de los 67,5 millones de católicos en EE.UU., son de origen hispano, la mayoría de ellos inmigrantes que, al mantener su fe, ayudan a contrarrestar la disminución en el número de miembros de la Iglesia Católica en este país.
Ante estos datos, no es de extrañar que el Papa se interese por esta comunidad y los problemas que la afectan, en particular el asunto de la inmigración.
Tancredo aprovechó estos datos para indicar que "los comentarios sobre inmigración tienen poco que ver con la propagación del evangelio y están dirigidos más bien a reclutar nuevos miembros de la Iglesia".
"Esto no es predicar, es un marketing a partir de la fe", puntualizó Tancredo. (EFE)
