Se encontraron fisuras causadas por las vibraciones permanentes.
La información fue confirmada por el vicario Rodrigo Tupper.
Tupper aseguró que cerrar nuevamente la Plaza de Armas es una "gran pérdida de dinero".
El arzobispado de Santiago busca evitar nuevos daños en la Catedral de Santiago por los trabajos de Metro, los que ya han ocasionado fisuras en la misma.
Como consignó La Segunda, el vicario general del Arzobispado, Rodrigo Tupper, confirmó que "con respecto a esos trabajos nosotros tenemos dos preocupaciones: lo más importante es que ya hay un daño estructural, principalmente fisuras, por las vibraciones permanentes que han ocasionado los trabajos que está realizando Metro en calle Bandera".
"Eso ya lo han certificado nuestros asesores, por lo que tenemos que evitar mayores daños", añadió.
Hace unos meses, el Cabildo Metropolitano advirtió al Consejo de Monumentos Nacionales sobre los problemas que ya han causado las obras del ferrocarril subterráneo.
En relación al posible cierre por tres años del sector, Tupper también comentó que "si se llega a hacer ese proyecto se va a dañar todo el trabajo, se va a volver a ensuciar la fachada que hemos estado tratando de limpiar, lo que se va a convertir en una gran pérdida del dinero que se ha invertido".
El arquitecto y académico de la Universidad Central, Jaime Migone, aseguró que "no necesariamente se tienen que producir daños".
"Metro es una institución seria que siempre ha tomado las providencias en casos como éste. Si el diseño de ingeniería del pique está bien hecho no tendría que haber problemas. El tema pasa por los inconvenientes urbanos que genera que se hagan trabajos justo cuando se terminó de arreglar la Plaza de Armas", agregó.
