El director regional del Servicio de Vivienda aseguró que el derrumbe que causó la amputación del brazo de una menor de dos años se habría evitado pintando una vez al año los fierros que afirmaban la estructura.
El director regional del Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu) de la Quinta Región, Francisco Pinto, señaló que son los dueños los responsables de la caída de uno de los pasillos de acceso a la población Costa Brava II, del Cerro Playa Ancha, en Valparaíso, ya que durante 18 años no realizaron ningún tipo de mantención.
La autoridad agregó que el problema no es de calidad de los materiales usados o de mala construcción. "Simplemente es un problema de corrosión, de elementos que no tuvieron mantención, que están separados sólo por 300 metros de la costa y no tienen ninguna protección".
La estructura de la loza de la caja de escala del edificio de departamentos cayó por fatiga de materiales el jueves 30 de marzo, y produjo la amputación de un brazo de Paola Sánchez Silva, una menor de dos años.
En El Diario de Cooperativa, Pinto sostuvo los propietarios de las viviendas son los que tienen la obligación legal de su mantención. "El Estado no tiene facultad para intervenir en propiedad privada. En este caso lo estamos haciendo a la luz de una situación de emergencia que ha producido la desgracia que sufrió esta niñita", afirmó.
Además, agregó que esta tragedia se habría evitado tan sólo si el fierro se hubiese lijado y pintado todos los años.
La autoridad indicó que funcionarios del Serviu se acercaron a hablar con los vecinos para que se inscribieran en el subsidio de reparación, pero en la ocasión no hubo mayor interés.
"Es lamentable lo que pasó, pero con estas personas se trabajó, a fines del año pasado (2005) fueron del propio municipio a hablar con dirigentes y con la gente para incluirlos en el subsidio de reparación y hubo bajísimo interés", enfatizó.
El director regional del Serviu indicó que el problema es que en el conjunto, que tiene 18 años, viven en su mayoría arrendatarios, los que son renuentes a asignar recursos para arreglar un departamento que no es propio.
La autoridad descartó que este problema se vaya a presentar en el resto de la población o en otras viviendas sociales que están cercanas a la costa y comentó que Serviu está realizando un catastro por todo el resto de los edificios del área para asegurarse que no ocurra otra desgracia.
Las familias directamente afectadas por el derrumbe de la caja de escala son seis, pero en el conjunto viven en total 380 familias. (Cooperativa.cl)
