El ministro de Salud afirmó en Cooperativa que "en la medida que yo me acobardé, soy un cómplice pasivo".
"La experiencia de asustarme funcionó", reconoció.
"La había contado en círculos íntimos, no creo que valga la pena hacer un gran asunto de esto", comentó sobre su experiencia.
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, detalló en Un Nueva Mañana su experiencia cuando fue detenido durante la dictadura de Augusto Pinochet.
En los estudios de Cooperativa, el secretario de Estado declaró que "de ninguna manera, tengo que decirlo claramente, fui torturado", precisando que "fui interrogado bajo apremios".
"En la Escuela de Medicina, en la universidad, hicimos muchos esfuerzos con algunos compañeros para involucrarnos en la búsqueda de detenidos desaparecidos y, efectivamente, me tocó patrocinar muchos recursos que se conocían como habeas corpus, y eso nos llevó a un juzgado que estaba en la Avenida España", comentó.
Añadió que "como fui varias veces, se puso cada vez más duro y una vez me tocó pasar a una sala especial, donde estaba el fiscal (Fernando) Torres, muy amenazante. Y al poco tiempo después, estando parado en la esquina de mi casa esperando micro para ir a la universidad, en la mañana aparece un Fiat 125 blanco delante de mí, con cuatro personas fuertemente armadas".
"'¿En qué estai' metido?', preguntaron", dijo el secretario de Estado, antes de ser trasladado a Villa Grimaldi. "Creo que mucha gente pasó por ahí y el fin era asustar", agregó.
Sobre por qué revelar esta historia ahora, comentó que "la había contado en círculos íntimos, no creo que valga la pena hacer un gran asunto de esto (...) Escuchar el relato de la gente era escalofriante".
"Tengo de declarar es que yo soy un cómplice pasivo. O sea, creo cada uno tiene que juzgar su historia, pero en la medida en que a mí me pasó esa experiencia y que a mí me asustó mucho esa experiencia de soledad", confesó, haciendo referencia a las acusaciones del Presidente Sebastián Piñera a los "cómplices pasivos" de la dictadura.
Indicó que "en la medida que yo me acobardé, soy un cómplice pasivo. A lo mejor pude haber sido heroico o haber muerto, pero la experiencia de asustarme funcionó".
El ministro fue interpelado en la Sala de la Cámara de Diputados el pasado miércoles, donde la oposición acusó a Mañalich de "faltar a la verdad", pero el secretario de Estado reiteró la defensa a su gestión, indicando que "me sentía muy bien preparado" y que "me parece un buen instrumento".
Ley de Fármacos: "Hay que votarla ya"
El titular de Salud también fue consultado en Cooperativa por la Ley de Fármacos, señalando que "hay que votarla ya, despacharla y transformarla en una garantía de derecho para los ciudadanos que hoy están muy desvalidos y que hoy viven la colusión, que tienen que hacer grandes gastos y que la única solución es esta ley".
"Así que un llamado apoyarla y a los parlamentarios a votarla a la brevedad posible".
Afirmó que "desde un punto de vista conceptual, sanitario, lo primero que uno tiene que decir es que nosotros tenemos que avanzar claramente a que los medicamentos sean parte de la garantía de salud".
Mañalich indicó que "así como una persona tiene garantizado que lo van a operar de la próstata en el AUGE, que determinados medicamentos son esenciales y que deben ser garantizados para la ciudadanía, dependiente de su ingreso y de cualquier situación".
"La Ley de Fármacos es un tremendo instrumento, nosotros estamos muy atrasados en relación a otros países, en el cual se exige que se exige con nombres genéricos y la senadora (Soledad) Alvear lo avala, que haya bioequivalencia, que se puede importar medicamentos por Senabast que un laboratorio tiene restringido en su venta o a precios exorbitantes en Chile; que se puedan vender en góndolas de farmacias y que se fraccionen los remedios", detalló.
Comentó que "producto de la interpelación no se pudo legislar, y ahora llamamos a votar y resulta que los parlamentarios no están durante un mes en Valparaíso, por lo que la votación final es hasta fines de noviembre".
