Subsecretario Sergio Galilea recorrió la zona entre el río Correntoso y el lago Chapo.
Desborde de los ríos se llevó los puentes de concreto Río Blanco y Torrente.
La zona fue afectada por los lahares generados por el material volcánico de las laderas del macizo.
El Subsecretario de Obras Públicas, Sergio Galilea, recorrió este miércoles la zona ubicada entre el río Correntoso y el lago Chapo, en la Región de Los Lagos, donde se produjeron los problemas más graves por la crecida de algunos ríos, tras la erupción del volcán Calbuco.
En la zona algunos afluentes tomaron distintos caminos afectando los sectores inmediatamente aledaños tras la erupción del macizo.
El Subsecretario Galilea inspeccionó la zona del rio Pichiblanco donde maquinaria está haciendo un enrocado rápido para mejorar la "caja" del río, de modo de enfrentar la posibilidad de una lluvia intensa en la zona, con el consiguiente aumento del caudal.
"Esta es la zona más afectada tras la erupción del volcán Calbuco porque las aguas de los ríos y otros afluentes descendieron con mucho caudal y se desbordaron en varios lugares. Tenemos una ventana de cinco días en que al parecer no vienen fuertes lluvias, lo que nos permite reforzar con roca los lados del río Pichiblanco", explicó la autoridad.
El desborde de los ríos se llevó los puentes de concreto Río Blanco y Torrente, los que deberán ser reconstruidos, mientras que seis kilómetros de la ruta al lago Chapo, dañados también por los ríos, serán reparados a contar de los próximos meses una vez que estén disponibles los respectivos diseños de ingeniería.
En la zona afectada por la erupción del volcán se encuentran trabajando unas 70 máquinas, de las cuales alrededor de 25 están dedicadas a limpiar los cursos de los ríos que aumentaron fuertemente sus afluentes producto de la erupción.
