"Cuando vuelva a llover, el agua se mezclará con la ceniza" del volcán Calbuco, advirtió David Pyle en Cooperativa.
Indicó que el macizo "es un volcán muy grande y complicado".
"La ceniza más fina es muy arenosa, no es buena para los animales, altera los flujos de agua", indicó.
El vulcanólogo y profesor de la Universidad de Oxford David Pyle comentó en Lo Que Queda del Día de Cooperativa la situación del volcán Calbuco, que este jueves registró su tercer pulso eruptivo, y advirtió de eventuales riesgos debido a la ceniza expulsada.
Pyle, que estudia los volcanes del sur de Chile desde hace varios años, detalló que "el principal problema hoy alrededor del Calbuco, en el futuro inmediato, será la próxima lluvia. Cuando vuelva a llover, el agua se mezclará con la ceniza, será arrastrada en los ríos, creará aludes y, como han sido en el norte, pueden ser muy destructivos".
"Hay problemas también en la calidad del aire, la visibilidad, los vuelos, pero la ceniza tiene consecuencias que son físicas", manifestó.
Además, señaló que "creemos que los efectos sobre la salud humana son pequeños y manejables, pero en áreas urbanas es importante limpiarla cuando se puede, principalmente porque es un tipo de suciedad que puede generar otros daños".
"En Patagonia las principales consecuencias de la ceniza a mediano plazo se sienten sobre la agricultura. La ceniza más fina es muy arenosa, no es buena para los animales, altera los flujos de agua. No es tóxica, pero puede bloquear escurrimientos de agua", añadió.
Sobre sus estudios en el macizo de la Región de Los Lagos, Pyle dio cuenta que "hemos trabajado en el Calbuco a partir de los antiguos depósitos de ceniza que emitió el volcán. Algunos de ellos están muy bien preservados en torno al Reloncaví, hay algunos depósitos excepcionales de ceniza que demuestran una actividad volcánica reiterativa y que el suelo se formó entremedio de estas erupciones".
"Hemos podido datar alrededor de 13 erupciones, la más antigua de ellas hace 10 mil años, luego una secuencia de erupciones hasta una más reciente hace unos 200 años, pero esa es una parte pequeña de la historia del Calbuco, que es un volcán muy grande y complicado", aseguró.
Incluso, dijo que "requiere un gran esfuerzo tratar de detallar y entender su pasado, pero los depósitos que hemos estudiado nos hablan que ha tenido erupciones muy grandes en el pasado".
