A menos de dos semanas del inicio oficial de las clases, el 5 de marzo, el Gobierno sigue trabajando para garantizar apoyo y acompañamiento a las familias damnificadas por la catástrofe de los incendios forestales en la Región de Valparaíso, y que deberán ser desalojadas este viernes de los colegios que siguen habilitados como albergues.
El ministro de Educación, Nicolás Cataldo, subrayó que "el inicio del año escolar esperamos desarrollarlo con la mayor normalidad posible".
"Y cuando digo 'esperamos' es porque estamos trabajando junto a las instituciones que están hoy día a cargo de la emergencia, al Ministerio de Desarrollo Social y Familia, al Ministerio del Interior, la Delegación Presidencial Regional, el propio gobernador que se nos incorporó justamente porque estaban en el Cogrid, a la Seremi de Educación que también es parte de esa coordinación, para resolver lo que tiene que ver con los centros de acopio y los albergues que hoy día están siendo utilizados en ese fin, obviamente muy noble, y que son escuelas que esperamos que puedan iniciar su año escolar con la mayor normalidad", sostuvo.
Se estima que unas 600 personas siguen albergadas en nueve colegios de la región.
La delegada presidencial regional, Sofía González, expuso que el Comité de Gestión del Riesgo de Desastres (Cogrid) "está trabajando en dos direcciones: la primera es la importancia que tiene el poder retornar a clases en tiempo y forma, considerando que es parte del sistema de protección de miles de familias".
"Y la segunda -remarcó- es que esa decisión no es en desmedro del bienestar o abandono de las familias que aún se encuentran en los albergues. Respecto de quienes están hoy día ahí, van a tener una diversidad de respuestas de acompañamiento, protección y cuidado".
En la víspera, la ministra vocera, Camila Vallejo, relevó que la desocupación de las escuelas irá de la mano con el pago del Bono de Acogida y la habilitación de hoteles.
Por otro lado, la ministra del Interior, Carolina Tohá, llegó hasta Quilpué para reunirse con los damnificados, allí los afectados plantearon que no han podido acceder a los seguros de incendios, los que están siendo retenidos por los bancos, además les siguen cobrando los dividendos habitacionales.
Al respecto, la secretaria de Estado declaró que "vamos a encargarnos personalmente de que, a través de la Superintendencia que se dedica a estas materias, haya un apoyo directo a ustedes, una asesoría y un trabajo también con las aseguradoras. Hay muchas casas afectadas, y todos podemos ver que no hubo ninguna participación de las víctimas. No está en duda que haya habido un autoincendio, entonces debiera haber una solución rápida".
