La Comisión de Educación de la Cámara aprobó en general y particular el proyecto que elimina la prohibición para estudiantes y funcionarios de participar en los gobiernos de universidades, institutos profesionales y también centros de formación técnica.
La iniciativa que termina con el DFL2, una de las demandas históricas del movimiento estudiantil para democratizar los estamentos internos de distintas instituciones de educación superior, pasará a su discusión en la sala.
El diputado de Revolución Democrática, Giorgio Jackson, expresó que "el proyecto de ley lo que hace es quitar trabas que históricamente se han presentado para permitir esa participación, pero mantiene el respeto por la autonomía universitaria, que es algo que todas las comunidades lo han requerido como algo valioso".
"Por lo tanto, la autonomía sigue estando intacta y lo único que se establece en el proyecto es que las mismas comunidades internamente en procesos de discusión puedan levantar cuáles son los porcentajes de influencia que puedan tener cada uno de los actores involucrados en la comunidad. Pero creemos que eso responde a discusiones de nivel local más que a algo que se imponga a nivel general a toda la universidad por igual", afirmó.
En la misma línea, la diputada del Partido Comunista Camila Vallejo comentó la aprobación y explicó la autonomía que se mantendrá la interior de las universidades.
"Resguarda más la autonomía de las instituciones de educación superior para que sean sus comunidades y sus rectores, directores, decanos, académicos, funcionarios y estudiantes quienes definan democráticamente cómo va a ser su gobierno universitario bajo ciertos principios y normas básicas de democracia interna", indicó.
Vallejo añadió que "depende de las comunidades cómo se organicen sus instancias de gestión y de dirección y, también, cómo van a ser electas sus autoridades. Esto no impone nada, lo que hace es prohibir".
La "única diferencia" de la UDI
El diputado UDI Romilio Gutiérrez aseguró que, desde la oposición, la "única diferencia que tenemos en este proyecto es que, al final, las instituciones de educación superior no terminen en un co-gobierno, lo que puede afectar su desarrollo y sus perspectivas de proyectos educativos con visión de futuro, de medio y largo plazo".
"En general, estamos completamente de acuerdo de que no pueden haber impedimentos para que tanto los funcionarios como los estudiantes se organicen, tanto en las instituciones públicas y privadas, sin ninguna injerencia y limitación", afirmó.
Mineduc contento con el resultado
Como representante del Mineduc estuvieron presentes en la discusión el jefe de la División de Educación Superior, Francisco Martínez, y el secretario ejecutivo de la reforma educacional, Andrés Palma.
Este último valoró la aprobación de esta iniciativa: "Estamos muy contentos del espíritu, no hubo votos en contra de la derogación de las normas y eso augura una buena perspectiva no solo para este proyecto el resto de su tramitación, sino que para cuando entremos en la discusión de los proyectos que tienen que ver con las universidades, la nueva institucionalidad universitaria".
"Estamos muy contentos de este resultado en la Comisión de Educación y esperamos que sea parecido en la Cámara de Diputados y en el resto de los trámites", aseveró Palma.