El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés (PPD), puso hoy en duda la conveniencia de implementar la gratuidad universal en la educación superior -una de las principales promesas de campaña de Michelle Bachelet-, afirmando que "la sociedad" chilena debe "preguntarse" si quiere destinar la cantidad inmensa de recursos indispensables para ello, a costa de postergar otras "necesidades".
Esta mañana, a poco de que se iniciara formalmente el trámite del proyecto de reforma presentado por el Gobierno y se conociera públicamente la integridad del texto, Valdés dijo en un punto de prensa ante periodistas que "para llegar a la gratuidad para todos es posible que la sociedad tenga que tener una discusión más profunda respecto de si quiere destinar todos esos recursos a eso u otra cosa".
La gratuidad universal de la educación superior "cuesta muchos recursos"; "aproximadamente un punto y medio de PIB", explicó Valdés.
"El PIB nuestro es de 240 mil millones de dólares. Por lo tanto, 1 por ciento son 2.400 millones de dólares; (para la gratuidad) estamos hablando de un poquito menos de 4.000 millones de dólares, eso es lo que cuesta. Ahora, si Chile tuviera esa plata -supongamos que tenemos la suerte de que el precio del cobre vuelve a tres dólares y se mantiene ahí-, la pregunta siguiente que tiene que hacerse la sociedad y que el proyecto de ley pone sobre la mesa es: ¿Queremos usar toda esa plata en educación superior o hay otras necesidades también que compiten con ésta, (como) salud, educación no terciara, sino que primaria, secundaria, jardines infantiles, pensiones?", planteó el secretario de Estado.
"Queda para la sociedad discutir si es que necesita o no allegar más recursos para una gratuidad total, (...) de manera de decir: '¿Saben qué? Vamos a concentrar todos los esfuerzos en educación superior", insistió Valdés, que al ser requerido para que explicitara su opinión, respondió: "Yo soy un voto en 18 millones de chilenos que tiene que decidir esto".
"No haremos nuevas reformas tributarias"
Consultado por los mecanismos de financiamiento y el cronograma contemplado por el proyecto de ley, Valdés señaló que "con la carga tributaria actual es posible financiar cierto avance en gratuidad", pero la actual administración no va a realizar un nuevo ajuste impositivo.
"Nosotros no vamos a aumentar los impuestos. Este Gobierno, en materia impositiva, hizo lo que tenía que hacer. En este Gobierno nosotros no vamos a hacer nuevas reformas tributarias", aseguró.
Andrade no cierra la puerta a un alza impositiva
Estas últimas palabras de Valdés encontraron veloz réplica en el presidente de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade: "Yo no me atrevería a ser categórico en una afirmación de esa naturaleza", señaló el parlamentario socialista.
"Si de pronto la sociedad chilena entiende que la demanda de gratuidad es de tal naturaleza y de tal legitimidad que hay que hacerse cargo de ella, no tendría por qué, a priori, descartarse un nuevo ajuste fiscal", opinó Andrade.
"Creo que es aventurado decir a priori que no, cuando todavía no tenemos claridad respecto a la tramitación de este proyecto y a las legítimas presiones que va a haber respecto a los tiempos para avanzar en gratuidad. Creo que es un exceso de parte del ministro de Hacienda. Yo entiendo que el ministro tiene que dar señales. Lo comprendo, pero bueno... yo no soy ministro", señaló el ex timonel PS.
Montes: Todos las leyes comprometen el futuro
En tanto, el senador socialista Carlos Montes respondió, luego de participar en un encuentro con rectores de universidades del Estado, a algunas de las críticas surgidas desde la oposición a propósito de la presentación de la iniciativa.
"Aquí la derecha ha sostenido que este proyecto está 'comprometiendo a los gobiernos de futuro', (pero) todos los proyectos comprometen a los gobiernos del futuro. Acuérdense que aprobamos la pensión básica solidaria, que compromete por muchos años. Acuérdense que el Presidente Piñera aprobó un sistema que llamaron Ingreso Ético (Familiar), que compromete por muchos años (...) Por lo tanto, ese argumento no tiene ningún fundamento", señaló Montes.
Respecto a las dudas en torno al financiamiento, el legislador opinó que lo presentado por el Gobierno "está bastante bien calculado y (también) puede haber reasignaciones presupuestarias".
"Eso lo vamos a ver en el camino, pero queremos decir con claridad que aquí no es sólo un problema de dinero, es un problema de que Chile tiene que tener una universidad comprometida con su desarrollo, que sea una conciencia crítica de Chile, que le permita avanzar", manifestó el congresista.
