En un acto simbólico en la Catedral de Santiago, el arzobispo cedió paso al nuevo administrador apostólico de la Arquidiócesis.
"No bastan retoques de maquillaje", planteó éste.
Este sábado el papa Francisco aceptó a renuncia de Ezzati y nombró a Aós como encargado.
El cardenal Ricardo Ezzati dejó definitivamente su rol de arzobispo de Santiago este domingo, en una misa en la Catedral Metropolitana en la que entregó el mando a Celestino Aós, el nuevo administrador apostólico de esta jurisdicción eclesiástica en "sede vacante".
"Hubo críticas no fundadas"
La eucaristía comenzó con la lectura -por parte del nuncio Ivo Scapolo- del decreto de asignación de Aós como administrador apostólico. En esta oportunidad, Ezzati aprovechó de agradecer a quienes lo ayudaron y han "estado a su lado", pero también a quienes lo criticaron.
"Gracias a aquellos que -seguramente por desconocimiento, a veces, o por una búsqueda que puedo considerar o considero honesta- han querido prestarme el servicio del aguijón de su crítica, a veces amarga y a veces -tengo que decirlo- no fundada, en la verdad objetiva de las cosas", dijo el cardenal.
"No bastan retoques"
Aós, por su parte, y como nueva autoridad, apuntó que acogerá "de un modo especial" a los que "sufren el atropello a su dignidad de persona, resultado de los abusos y delitos absolutamente injustificables".
"No bastan retoques de maquillaje; necesitamos reformas y cambios profundos, cambios que parten del corazón de cada uno de nosotros", afirmó Aós.
El nuevo administrador apostólico admitió que no se han hecho las cosas bien, pero dijo que la intenciójn es "hacerlas mejor".
"Sabemos que hacer esas cosas mejor no es simplemente poner un maquillaje sino que requiere cambios. El cambio nace desde el corazón", insistió.
Laicos: Ya no resisten más pedidos de perdón, esperamos justicia
En conversación con El Diario de Cooperativa, Osvaldo Aravena, vocero de los laicos de Santiago, rechazó los dichos de Ezzati en cuanto declaró "salir con la frente en alto" del cargo.
"Esperamos que él (Ezzati) deje de estar diciendo de que lo ha hecho bien o que, en el fondo, lo han acusado injustamente. Esperamos que hable, que preste declaraciones y que no guarde silencio, como lo hizo la primera vez", dijo Aravena.
El representante también espera "que el nuevo administrador apostólico realice un cambio de verdad, coherente con el decir de hacer justicia (...) Aquí ya no resisten más declaraciones, no resisten más pedidos de perdón, lo que esperamos es que los sobrevivientes puedan tener verdad, justicia y reparación", sentenció.
Al término de la misa, Ezzati salió de la catedral sin entregar declaraciones.
