José Andrés Murillo entregó en Cooperativa los resultados de una encuesta sobre las confianzas de los adolescentes.
El denunciante del cura Karadima enfatizó que el 20 por ciento de los adolescentes considera que un adulto transgredió sus límites.
El presidente de la Fundación para la Confianza, José Andrés Murillo, comentó los resultados de una encuesta realizada junto a la corporación Opción sobre las confianzas de los adolescentes en Chile.
En diálogo con Cooperativa, Murillo -uno de los denunciantes en contra del cura Karadima- sostuvo que una de las principales conclusiones es que el 20 por ciento de los jóvenes entre 12 y 17 años considera que alguna vez un adulto ha transgredido su límites.
"Es un estudio en base a tres grandes ejes que son el poder, la confianza y el abuso. No son temas que estén ajenos a lo que está pasando hoy día, creemos que son los tres temas fundamentales en lo político, sino en lo social e incluso en lo económico", afirmó Murillo.
Entre los datos que revela el sondeo aplicado a 500 jóvenes de la Región Metropolitana, "la primera persona de confianza es la mamá con un 74 por ciento, lo que es alto, pero uno esperaría más y eso entrega un dato que un 20 por ciento de los jovenes confían poco o nada en la mamá", manifestó Murillo.
"En el papá, un 64 por ciento confía mucho o bastante en su padre, pero de ahí nos pegamos un salto significativo al profesor, donde 22 por ciento confía en su profesor", recalcó.
Otro dato llamativo es que "la primera figura de peligro para los jóvenes es un desconocido" con el 70,4 por ciento y le sigue el sacerdote, donde "un 43,6 por ciento de los jóvenes considera que es una figura peligrosa".
"La gente no es tonta, hoy día cuando dicen que un sacerdote es una figura de peligro, hay algo detrás de lo que la iglesia tiene que hacerse cargo", recalcó.
"Me llama la atención que un 20 por ciento de los adolescentes considera que alguna vez algún adulto ha transgredido sus límites. Qué significa eso exactamente, es difícil establecerlo, pero hay una sensación de que algún adulto se le ha acercado demasiado, ha entrado en su espacio y lo ha hecho incomodarse", resaltó el presidente de la Fundación para la Confianza.
