Fernando Orrego, Francisco Riquelme y José Poblete recibieron cargos de homicidio por omisión.
La audiencia de formalización de los gendarmes se extendió por 19 horas.
Tras 19 extensas horas de formalización en el 11° Juzgado de Garantía del Centro de Justicia capitalino por el incendio de la cárcel San Miguel -donde murieron 81 reos el pasado 8 de diciembre- la justicia resolvió dejar en prisión preventiva a tres gendarmes.
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| Familias de reos fallecidos exigieron justicia. (Foto: UPI) |
Se trata de Fernando Orrego, Francisco Riquelme y José Poblete, quienes fueron formalizados por homicidio por omisión, arriesgando penas desde cinco años y un día hasta los 15 años de presidio. Por ahora serán ingresados a la cárcel de Alta Seguridad.
"No prestaron la ayuda correspondiente y siendo funcionarios de Gendarmería y en consecuencia se encuentran en una posición de garante respecto de quienes se encuentran privados de libertad", señaló el magistrado Rodrigo Cayo.
"Y por tanto el hecho de matar a otro puede ser el resultado de una acción u omisión, por tal razón el tribunal va a decretar la medida cautelar de prisión preventiva", añadió el juez.
El Ministerio Público formalizó además por cuasidelito de homicidio reiterado al subteniente José Hormazábal, teniente coronel Patricio Campos, el ex alcaide coronel Segundo Sanzana, el coronel Carlos Bustos y el teniente coronel Jaime San Martín.
Estos cinco oficiales quedaron con medidas cautelares de firma quincenal y arraigo nacional, y arriesgan desde tres años y un día hasta los cinco años de presidio.
"Un primer paso"
Por su parte, el fiscal a cargo de la indagatoria, Alejandro Peña, expresó que "esta resolución es un primer paso, ya será la Corte de Apelaciones que en su momento se pronunciará, pero es un primer paso, es un gran respaldo para la investigación y en especial para las víctimas".
En la velatón organizada afueras del centro judicial, una de las madres señaló que quedó "no tan conforme, pero vamos avanzando de a poco, ojala que lleguemos al logro que queremos todas las madres, que se haga justicia por nuestros hijos, por todos los fallecidos", dijo.
De hecho el abogado querellante, Carlos Quezada, solicitó que la totalidad de los imputados quedara en prisión preventiva "por un tema de congruencia", algo que finalmente no ocurrió.
