Gendarmería trasladó este martes a Mauricio Ortega -condenado por agredir brutalmente a Nabila Rifo en 2016- desde el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Coyhaique para que no tuviera contacto con el hijo de la afectada, quien permanece en prisión preventiva tras enfrascarse en una fatal discusión con la pareja de su madre.
El fatídico hecho se registró el pasado 1 de febrero, cuando dos de los cuatro hijos de Nabila Rifo tuvieron una seria discusión con su pareja, Ignacio Bañares. Durante la pelea, ella llamó a Carabineros para alertar de la situación, pero cuando los policías llegaron ya era demasiado tarde: Bañares estaba tendido en el jardín del inmueble de Rifo con heridas de gravedad.
Tras lo anterior, se constató la muerte del hombre, por lo que ambos hijos de Rifo que participaron de la discusión fueron detenidos y formalizados. El menor de los hermanos, de 17 años, quedó en internación provisoria en el Sename, mientras que el mayor, de 20, en prisión preventiva en el mencionado recinto carcelario de Coyhaique, donde también cumple condena Mauricio Ortega.
El traslado, explicó en un comunicado Gendarmería, "se efectúa en base a la determinación en criterios de segmentación por parte de la autoridad penitenciaria".
Ortega, que ya fue reubicado en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Aysén, y el hijo de Nabila no estuvieron juntos en ningún momento, debido a que se encontraban en diferentes secciones del penal, dado que el primero cumple una condena y este último aún es sólo imputado.
Sin embargo, una fuente de Gendarmería contó a Cooperativa Regiones que el agresor de Nabila era mozo al interior del penal Coyhaiquino y repartía la comida a todos los presos, por lo que un encuentro entre ambos no se descartaba. Por su trabajo, explicaron, recibe un sueldo de 300 mil pesos.
La premura por el traslado, precisaron las mismas fuentes, se debe además a que Ortega y el hijo mayor de Nabila tenían una mala relación.
DEFENSORÍA APELA PRISIÓN PREVENTIVA
En paralelo, la Defensoría Penal Pública ingresó este viernes un recurso de apelación ante la Corte de Coyhaique para revertir la prisión preventiva y la internación provisoria dictada para los hijos de Rifo.
La tesis del organismo apunta a una presunta actuación de los imputados en defensa propia o de un familiar, en este caso su madre, por lo que podrían optar a una medida cautelar de menor intensidad, como arresto domiciliario total o parcial.
"Nosotros entendemos que el delito que ha invocado el Ministerio Público no es tal, nosotros argumentamos que existe otra calificación jurídica respecto de nuestros imputados. Principalmente respecto de que nuestro juicio concurre con la legítima defensa de parientes y la legítima defensa propia", señaló el defensor penal público Mauricio Martínez.
Durante el plazo de investigación vigente de 60 días, la Defensoría buscará respaldar la tesis de legítima defensa, para lo cual cuentan con dos denuncias previas de violencia intrafamiliar que los hijos de Rifo habían presentado tanto en favor de ellos como de su madre.
Durante la próxima semana este recurso de apelación debiese ser ser revisado por la Corte de Apelaciones de Aysén.
