Los funcionarios no volvieron a entablar diálogo con el Gobierno desde que se quebró la mesa de trabajo, a mediados de semana.
El petitorio de demandas es apoyado por el 97% de los trabajadores de la institución penitenciaria.
A las 00:00 horas de este lunes comenzó una movilización nacional de los funcionarios de Gendarmería, luego de que las negociaciones posteriores al quiebre de la mesa de trabajo con el Gobierno, a mitad de semana, no prosperaran.
El miércoles se oficializó la falta de acuerdo, con los dirigentes del gremio señalando que el Ministerio de Justicia no atendió su disposición a dialogar sobre una propuesta "satisfactoria", que se mantuvo en pie hasta este domingo.
Su petitorio aborda 11 demandas y es apoyado por las cinco asociaciones de trabajadores penitenciarios, que representan al 97 por ciento del total de los funcionarios de Gendarmería.
Entre los puntos más relevantes se encuentran una mayor dotación de personal, ampliación de la carrera funcionaria, incentivo al retiro voluntario y mejora en la escala de ascensos.
El vocero del Frente de Trabajadores Penitenciarios, Marcos Aburto, explicó que la movilización "obedece a la mezquindad de la contrapuesta que presentó el Gobierno, en relación a que en los 11 puntos que habíamos presentado en el pliego de peticiones inicial, zanjaron cuatro y, de ellos, uno que era el vital -la redistribución que garantizaba la carrera funcionaria para los trabajadores penitenciario- no se dio en la mesa de trabajo".
Aburto confirmó que "es una jornada de paralización, la intención es visibilizar la situación contractual que tenemos en Gendarmería, que es una situación precaria, que nos golpeó la cara con el anteproyecto que nos presentó el subsecretario de Justicia".
"Hay una molestia generalizada, no se atendieron las demandas por parte del Frente de Trabajadores y esto nos llevo a que hoy día estemos en un estado de paralización a nivel nacional, de Arica a Porvenir", relató.
El dirigente sostuvo que "la idea es bloquear los ingresos a cada uno de los penales, no permitiendo el ingreso ni la salida de internos y con eso creemos que vamos a tener un colapso en los centros de detención, de PDI, de Carabineros, pero de alguna manera tenemos que generar esta presión".
Pablo Jaque, presidente de la Asociación de Gendarmes de Chile, cree que el Ejecutivo resiste el ingreso de más trabajadores por la inversión que implicarán sus salarios.
"Estamos en el orden de los mil hombres por debajo de la dotación autorizada. Eso significa menos hombres en las unidades penales, más horas de trabajo para los que estamos actualmente activos, y evidentemente, un ahorro sustancial para el Gobierno por el sueldo de casi mil gendarmes que deberían estar hoy día en la planta", explicó.
En tal sentido, el dirigente advirtió: "No nos vamos a sentar a discutir la pobre propuesta que se presentó el día 31".
El Ministerio de Justicia indicó que no se referirá al conflicto con el gremio antes o durante las primeras horas de sus movilizaciones.
