Este lunes se decretó una preemergencia que no se constató.
El domingo los niveles de contaminación se elevaron a niveles de preemergencia por el "efecto partido".
Este 2017 han existido menos episodios graves de contaminación que en 2016.
Este lunes rigió en la Región Metropolitana la segunda preemergencia del año, pero por los niveles de contaminación existentes solamente se produjo una alerta ambiental, lo que fue calificado como una falla del modelo que pronostica los episodios por material particulado fino (MP 2,5).
El domingo recién pasado también hubo un error, pues se declaró alerta ambiental, pero los niveles de contaminación llegaron a niveles de preemergencia, marcando los índices más altos de este año, lo que según el Ejecutivo se debió al denominado "efecto partido", considerando los asados realizados por la final de la Copa Confederaciones.
Según explicó a La Tercera el secretario regional ministerial de Medio Ambiente, José Miguel Arriaza, el sistema utilizado es "probabilístico y no determinístico", refiriéndose a que el programa que se usa puede tener resultados variables y aseguró que el domingo hubo situaciones como el partido y las primarias, por lo que circularon automóviles que "aumentaron los índices en la cuenca".
En cuanto al día lunes, no se constató la preemergencia anunciada y solo se produjo una alerta ambiental durante la madrugada, mientras que el resto del día hubo una calidad del aire entre regular y buena en las distintas estaciones de medición capitalinas.
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La opinión de expertos
El académico del Departamento de Física de la U. de Santiago, Patricio Pérez, consideró que además de los datos científicos, se deben tomar en cuenta nuevos parámetros para evaluar decretar un episodio de excepción ambiental.
"Cada año cuando hay partidos de fútbol se generan altos niveles de contaminación. Esto implica que hay que considerarlos como una fuente importante, tal como las industrias o los vehículos", aseveró.
Mientras, Luis Cifuentes, investigador de la Escuela de Ingeniería de la U. Católica, dijo que "los modelos de pronósticos usados pueden fallar, pero la decisión final es de la autoridad", aunque manifestó que no decretar preemergencia el domingo fue positivo, ya que "los costos eran mucho más altos que los beneficios".
Pese a que técnicamente no habrían fallas en la decisión de la autoridad, en 2017 se han decretado más episodios de los que efectivamente han ocurrido.
Según el Ministerio del Medio Ambiente, este año se han declarado 23 alertas, pero solo se constataron 16, mientras que en el caso de las preemergencias se declararon dos, que no se constataron, y luego ocurrió una, la del domingo, que no se había decretado.
En 2016 se declararon 12 preemergencias y, de ellas, se produjeron ocho eventos. A esto se suma que se decretó solo una emergencia, pero se constataron tres jornadas.
