El ex comandante en jefe fue confrontado con ex oficiales de la FACH.
Afirmó que en la época en que su camarada fue torturado él no estaba destinado en la Academia de Guerra.
El ex miembro de la Junta Militar descartó ser "cómplice o encubridor" de los apremios al padre de la ex Mandataria.
Por alrededor de una hora se extendió el careo programado para este lunes entre el ex comandante en jefe de la FACh Fernando Matthei y los oficiales en retiro de la institución Raúl Vergara, Mario González y Jaime Donoso, además de la ex prisionera política Carmen Gloria Díaz.
La diligencia, ordenada por el juez Mario Carroza, se desarrolló en el segundo piso del edificio de las Fuerzas Armadas, ubicado en la intersección de Alameda con Zenteno, en el centro de Santiago, en el marco de la investigación por las torturas que provocaron la muerte del general Alberto Bachelet en 1974.
Según el abogado que representó a Matthei en esta instancia, Jorge Balmaceda, el ex uniformado negó haber tenido conocimiento de las torturas que se daban en el subterráneo de la Academia de Guerra Aérea, en El Bosque, de la cual era director entre fines de 1973 y marzo de 1974, época en la cual se produjeron los apremios y el deceso de Bachelet.
"Él negó su participación absolutamente", indicó el abogado Balmaceda.
"Él fue designado, por ser director de la Academia de Guerra, en funciones que no pudo cumplir, porque la Academia de Guerra estuvo ocupada por los tribunales militares", explicó el jurista.
Matthei no participó "ni en calidad de cómplice ni encubridor" en las torturas al padre de la ex Mandataria, pues él no estaba destinado a cumplir funciones en la Academia de Guerra en la época", indicó.
"Hay una persona que dice que lo vio a fines del año 74 y no sería raro, pero es una fecha en que le correspondía al general ir a entregar el cargo para el cual había sido destinado", señaló el letrado.
"Sabía lo que estaba ocurriendo"
"Él seleccionaba a las personas que tenían que pasar a ser interrogadas en un momento dado. Él decía: 'Que pase fulano o zutano'. Lo que sí puedo asegurar es que él no entró al lugar donde a mí me interrogaron", contó a la prensa, al término del careo, el sargento en retiro Mario González.
"Yo no creo que un comandante de una unidad pueda negar, sabiendo que había una fiscalía dentro de su unidad, lo que estaba ocurriendo ahí, y menos que se torturaba, porque la sala de torturas había sido prefabricada para torturar, había unos somieres de metal, lugares donde se colgaba a los presos", indicó González.
El capitán en retiro Jaime Donoso destacó que en el careo Matthei "acepta que se hizo cargo de la Academia de Guerra Aérea en diciembre del 73, y los centinelas, dentro, confirmaron que el (entonces) coronel Matthei asumía como nuevo comandante de esa unidad", aunque su abogado señale que no ejerció dicho cargo de manera propiamente tal.
Carmen Gloria Díaz, afirmó, en tanto, haber incluso intercambiado miradas con el uniformado: "Yo estaba detenida en los pasillos (...) y él pasaba".
"Él era el director de la AGA y no hizo nada por impedir" lo que pasaba, indicó la ex prisionera política.
"Él estaba a cargo de toda la guardia. Él suministró los instrumentos, todo, la seguridad interna y externa, así que él es responsable", según la mujer.
"Dentro de lo esperado"
El ministro Carroza indicó que "de acuerdo a como se había estructurado la diligencia, estuvo dentro de lo esperado".
"Hay otras declaraciones de testigos que estuvieron en la Cárcel Pública y sería lo último antes de resolver cuál es el camino a seguir", indicó el magistrado.
La Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos busca pedir el procesamiento de Matthei, cuestión que el juez Carroza ya rechazó en una ocasión y que luego ratificó la Corte de Apelaciones de Santiago.
