La ex ministra de Transportes Paola Tapia, fundadora de Mujeres en Movimiento, un "Centro de Liderazgo Sustentable que impulsa mujeres líderes en la agenda sustentable", comentó en Cooperativa los resultados del estudio sobre el acoso al interior del transporte público, y relató su propia experiencia con este tipo de hechos.
En diálogo con Una Nueva Mañana, Tapia aseguró que, como primera necesidad, "hay que visibilizar el problema, eso es fundamental".
"Muchas veces ocultamos esta información, no nos hacemos cargo de esta información... No hablo sólo de las autoridades, sino que de la sociedad civil, de nosotros mismos en nuestras casas, para poner estos temas en discusión y hacerlos evidentes", reflexionó.
La abogada indicó que "se trata de temas culturales, temas de educación, en que muchas veces las mujeres se han guardado esta información porque no se entrega en una encuesta, porque es muy difícil que a simple vista puedan entregar estos antecedentes".
Por otro lado, "existe una especie de culpabilidad de la mujer, que hace que incluso cambie la forma de vestir... Cuando una mujer sabe que va a tomar un bus se viste distinto, cuando va a tomar el Metro, lo mismo, porque en el fondo dice 'yo no puedo provocar'".
Cuesta hablar
De acuerdo a la investigación, los casos más comunes de acoso son "que se acerquen y le hablen en el oído, y lo otro ya es derechamente un acercamiento corporal de las partes íntimas y que muchas veces pasa a un forcejeo".
La ex autoridad recordó que "yo misma he sido víctima de acoso en espacios públicos, y a lo mejor nunca lo había dicho y es primera vez que lo comento, pero una tiene que decirlo... Es la única forma en que podemos cambiar nuestras conductas", señaló.
"Fue camino al transporte, cuando estaba en el colegio. Soy de regiones, de Viña del Mar, vivía en un sector bastante tranquilo y camino con uniforme al colegio. No fue algo grave, afortunadamente, un topón o medio manoseo y es una situación que hasta el día de hoy ni siquiera se la había comentado a mis padres", relató.
