Carabineros detuvo a una banda, compuesta por dos ciudadanos búlgaros y dos venezolanos, que se dedicaba a la clonación de tarjetas de crédito.
Luego de que uno de los integrantes del grupo fuera detenido y dejado en libertad -la semana pasada- por instalar un dispositivo para clonar tarjetas, la Policía investigó sus movimientos y descubrió que se reunía con otros sujetos para seguir cometiendo fechorías.
Esta vez el grupo se preparaba para instalar un sistema mediante el cual, a larga distancia, a través de un computador, podían realizar giros bancarios y robar información de las tarjetas.
"Lo novedoso en este caso es que se logra incautar un dispositivo, un microcomputador que era instalado directamente al sistema del cajero automático", señaló el capitán Renato Cárdenas, de la Dirección de Investigación Criminal de Carabineros.
"Lo interesante de esto es que es una nueva modalidad que obtiene toda la información que pasa por el cajero automático y, acompañada, de una microcámara, logran obtener también la clave de los clientes", agregó Cárdenas.
Desde un hotel donde residía el líder de la banda se incautó esta nueva máquina, además de tarjetas de crédito y computadores.
Se estima que hay por lo menos tres víctimas, mientras que los cuatro intrigantes de la banda pasarán a control de detención durante este jueves.
