Arturo Tapia Gómez fue formalizado por los delitos de femicidio y homicidio simple frustrado.
La defensa aseguró que el hombre tenía "una depresión no tratada correctamente desde muy joven".
El menor herido está internado en el hospital Roberto del Río con siete heridas propinadas con el mismo cuchillo.
En prisión preventiva quedó Arturo Tapia Gómez, de 54 años, tras asesinar a su conviviente y herir al hijo de la mujer, de 13 años, en la comuna de Recoleta.
El sujeto, que apuñaló a su pareja Rosa Villalobos con un cuchillo cocinero en 11 oportunidades, fue formalizado en el Sexto Juzgado de Garantía de Santiago por los delitos de femicidio y homicidio simple frustrado.
La máxima cautelar se mantendrá por los 90 días de plazo de la investigación y la defensa, a cargo de la abogada Lisette Rodríguez, destacó que hay distintas situaciones que desencadenaron los hechos.
"Hay unos antecedentes en que, efectivamente, él estaba con una depresión. Tomaba medicamentos a raíz de eso, una depresión no tratada correctamente desde muy joven", argumentó Ródríguez.
La defensora manifestó que "está absolutamente descolocado, no solamente hay un tema de arrepentimiento, sino que un tema de comprender la situación de cómo llegó a eso. Sí me parece que son circunstancias que parece un crimen muy horrible, macabro, pero tienen un contexto y ese contexto es la situación en la que él se encontraba no solo sicológicamente, en la situación laboral, los problemas que estaban enfrentando, las agresiones que habría sufrido también ayer y precisamente esto lo llevó a una pérdida de control".
Fiscalía descartó problemas mentales
El sujeto mantiene una depresión no tratada, además de problemas económicos y con su pareja. Sin embargo, el fiscal Rodrigo Díaz, de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, detalló que en la carpeta investigativa no se encuentran antecedentes de problemas médicos de Tapia.
"No hay ningún elemento que acredite que el imputado tenga algún problema de facultades mentales. Por el contrario, el actuar de él denota total manejo de sus acciones y su conducta, en el sentido que todo el tiempo estuvo conciente de lo que él realizó. Después, una vez que fue detenido, él renuncia a su derecho a guardar silencio y también declara con detalle todas las acciones realizadas por él", indicó Díaz.
Añadió que, "por lo tanto, si uno tuviese que hacer un pronunciamiento respecto a sus facultades mentales, todo apunta a que no tendría problemas psiquiátrico alguno, pero no hay que adelantar ningún concepto en este sentido por lo que la investigación va a estar destinada a saber sus facultades mentales están idóneas o no".
Tapia deberá permanecer en prisión preventiva en el penal Santiago Uno y arriesga una pena mínima de 15 años.
En tanto, el menor herido está internado en el hospital Roberto del Río con siete heridas propinadas con el mismo cuchillo.
