La subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, hizo un llamado este martes al Estado y al Congreso para que apure la legislación de la ley de control de armas, luego de los hechos de violencia registrados en Huechuraba y Maipú que significaron la muerte de dos menores.
"Cuánto falta para que entendamos que necesitamos entregarles herramientas para nuestras policías, si ayer no fue uno de los días más tristes porque fallecieron dos niños en hechos de violencia, con balas disparados sin ningún sentido", cuestionó.
La autoridad continúo planteando su inquietud y manifestó: "Qué es lo que tiene que pasar para que como Estado comprendamos que las armas no pueden ser tolerables en las manos de los delincuentes, y eso requiere ley, y eso requiere que el Estado se apure, y eso requiere que el Congreso legisle de una vez por todas la ley de control de armas".
De momento no hay detenidos en ninguno de los dos casos, sin embargo, se encontró uno de los vehículos implicados en la encerrona en Maipú y se investiga si alguno de los disparos provino de una arma de Carabineros o de los delincuentes.
La académica de la Universidad de Santiago y experta en seguridad Lucía Dammert señaló en El Diario de Cooperativa que el principal objetivo debe ser sacar de circulación de las armas en el país: "¿De dónde salen las armas? ¿por qué no hay huella balística? Ahora comprar armas es mucho más sencillo y las armas en el mundo delictivo simbolizan una forma de respeto", dijo la especialista.
ANTECEDENTES DEL CASO
Los menores, de seis (Tamara) y cinco años (Itán) fallecieron producto de disparos originados durante encerronas en las comunas de Maipú y Huechuraba en la noche de este domingo.
Durante esta jornada los familiares llegaron hasta el Servicio Médico Legal (SML) para retirar los cuerpos de los niños.
El abuelo de la menor, entre lamentos, expresó que estos hechos "siempre lo ves desde afuera, que les pasa a otros, pero nunca que te puede pasar a ti, y nos pasó a nosotros. Ahora qué podemos esperar. La justicia qué nos puede proporcionar hoy a nosotros, a las personas que somos afectadas con cosas tan terribles como el fallecimiento de un bebé".
El padre de la niña relató que "hace un año a mi también me hicieron una encerrona y me quitaron el auto. Por lo mismo, este era un tema que habíamos hablando varias veces con Camila (su esposa), de que si le querían quitar el auto ella lo único que tenía que hacer era bajarse rápidamente y sacar a la niña de la silla, nada más. El auto no importa, da lo mismo, no tiene valor, y eso fue lo que ella precisamente hizo: se bajó rápidamente, en ningún momento opuso resistencia y lo único que pidió fue sacar a la niña. Por eso es que no entiendo cuál era el fin de esta gente, de disparar a un ser indefenso".
