La diputada comunista no pudo ocultar su emoción cuando, el martes, pidió asumir la crisis del Sename con "ética" y "dejar las payasadas".
"Soy llorona", reconoció en una entrevista con el diario La Segunda.
El llanto de la parlamentaria fue considerado "genuino" por sus colegas.
La diputada comunista Camila Vallejo se refirió, en una entrevista con el diario La Segunda, al episodio de llanto que protagonizó el martes en medio de la interpelación a la ministra de Justicia, Javiera Blanco, mientras se discutía la crisis en el Servicio Nacional de Menores.
"Resolvamos esto con acuerdos y dejémonos de payasadas, por favor. Un poco más de moral y un poco más de ética", dijo Vallejo entre sollozos, sin poder ocultar su emoción.
"Sí, soy llorona", afirmó la ex presidenta de la FECh en una entrevista de tono liviano con el vespertino.
"¿Lloró cuando nació su hija?", le preguntó el medio. "La tomé en brazos y me puse a llorar", respondió Vallejo.
Ante la consulta específica de por qué lloró durante la interpelación, la legisladora explicó que "estaba indignada" y "se impuso la emoción a la racionalidad".
"El Congreso es rudo. Por eso he tratado de mantener las distancias y por eso parezco fría (...) pero siempre he dicho lo que pienso", indicó, y concluyó declarando: "Con todas las dificultades, me gusta lo que hago".
"Lágrima genuina"
La Segunda también consultó la opinión de algunos colegas diputados sobre el llanto de Camila Vallejo.
"A todos nos ha pasado", señaló el presidente de su partido, Guillermo Teillier.
"Fue el llanto de una madre", juzgó la socialista Maya Fernández.
"Me pareció una lágrima genuina", opinó el ex timonel UDI Patricio Melero.
"Mire, muchos dicen que la política es sin llorar. Pero yo creo que la verdadera política es con llorar", cerró el presidente de la Cámara Baja, Osvaldo Andrade.
