Diversos dirigentes de la Nueva Mayoría asumieron responsabilidades compartidas a la hora de la autocrítica sobre las relaciones con el Gobierno, admitiendo descoordinaciones en materia de ejecución del programa presidencial y en la antesala del cónclave con Michelle Bachelet previsto para el próximo lunes 3 de agosto en Cerro Castillo.
Las dudas en torno a los lineamientos de La Moneda en relación con los partidos del bloque quedaron plasmadas tras la aprobación del proyecto de carrera docente votado el pasado jueves en la Cámara de Diputados, donde los parlamentarios oficialistas votaron de forma dispar.
Para Jorge Pizarro, presidente de la Democracia Cristiana, tienda en la que tres de sus diputados se abstuvieron y uno votó en contra (Claudio Arriagada), existió una evidente "poca capacidad de ordenamiento", lo cual aspiran a corregir a futuro.
"Cuando se hacen mal las cosas hay que tomar decisiones que nos permitan después mejorarlas. La responsabilidad tenemos que asumirla nosotros, las directivas de los partidos, que no pudimos ordenar a las bancadas de diputados y el propio Gobierno", reflexionó el senador DC.
Por su parte el senador Fulvio Rossi (PS) dijo que la cita con la Mandataria puede generar un antes y un después para avanzar de mejor forma en la agenda legislativa, pero con realismo.
"No sé si uno pudiese hablar de desorden, yo hablaría más bien de falta de espíritu de coalición, excesivo oportunismo y además individualismo", comentó.
"Son responsabilidades compartidas naturalmente. Creo que hay un buen ambiente, tampoco hay que cifrar demasiadas expectativas, porque lo que no se resuelve en un año no se resuelve en un cónclave. No sigamos cometiendo los mismos errores que en el pasado", añadió el legislador de cara a la cita con Bachelet.
Rossi dijo creer que "es momento también para una reflexión crítica de cómo hacemos las cosas, de aquí en adelante, para recuperar apoyo para las reformas".
PRSD: "Hay falta de gobernabilidad"
Por último, el titular del Partido Radical, Ernesto Velasco, indicó que "más que desorden, lo que hay es absolutamente una falta de gobernabilidad dentro de la Nueva Mayoría para cumplir ciertos compromisos".
"Yo creo que de eso tenemos que hacernos cargo, y este famoso cónclave va a ser muy necesario, porque va a permitir que todos nos ordenemos de una mejor manera y poner el acento en mejorar por sobre todas las cosas la conducción política, el liderazgo, la comunicación, que claramente yo creo que hoy día estamos al debe", concluyó.
Otro ejemplo de las diferencias y descoordinaciones lo reflejó el diputado Enrique Jaramillo (PPD), quien votó en contra de la iniciativa y pese a acusar que nadie le dijo "nada" en la previa, pese a sus avisos, fue citado junto a Cristina Girardi y Rodrigo González -que se abstuvieron- para dar explicaciones al comité del partido el día lunes.
