La portavoz de la Presidencia argentina, Gabriela Cerruti, desligó este martes al gobierno de Alberto Fernández de las declaraciones del embajador de Argentina en Chile, Rafael Bielsa, en las que se había referido al candidato presidencial de ultraderecha, José Antonio Kast (Frente Social Cristiano), como un "pinochetista" que hace bandera su "antiargentinismo".
Cerruti aclaró, en diálogo con la radio FutuRock, que las declaraciones de Bielsa a la prensa fueron "en carácter absolutamente personal".
Agregó que "así lo hizo saber" el gobierno de Fernández a través de la conversación que mantuvo el canciller argentino, Santiago Cafiero, con su par chileno, Andrés Allamand.
Los dichos de Bielsa habían derivado en un comunicado emitido por la Cancillería chilena en el que el Ejecutivo señalaba que entendió que el diplomático -hermano de Marcelo Bielsa- se refirió al candidato "en términos inadecuados" y consideró que sus expresiones "representan una intromisión inaceptable en los asuntos internos de Chile y vulneran normas de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas".
Según enfatizó Cerruti, "no llegó a ser un entredicho diplomático" y el gobierno argentino entiende que no llegó a tener "ningún tipo de queja formal".
La portavoz explicó que "Argentina no se mete en los procesos electorales de ningún país, tal como dice la Convención de Viena, pero además como es la tradición de la Argentina".
Y señaló que "la relación con Chile tiene que ser la mejor relación posible".
Las palabras de Bielsa llegaron después de que Kast cosechara este domingo el mayor número de voto entre los siete candidatos que entraron en liza en la primera vuelta de las elecciones presidenciales, lo que le confirmó como postulante a la primera magistratura del país en el balotaje del próximo 19 de diciembre.
Su contrincante en segunda vuelta será el izquierdista Gabriel Boric (Apruebo Dignidad).
Ante esta situación, el aspirante frenteamplista a la Presidencia también se sumó ayer a las críticas a Bielsa y respondió que "no corresponde que un embajador intervenga en la política interna de un país".
"RAFA SE FUE AL CARAJO"
"Rafa se fue al carajo", aseveró al diario Clarín de Argentina un funcionario de la Casa Rosada muy cercano al embajador Bielsa. "No creo que pueda seguir como embajador en Santiago si Kast es presidente", planteó.
En paralelo, crece la presión de diplomáticos argentinos para que el jefe de la misión diplomática trasandina en nuestro país deje el cargo.
"Bielsa debe ser inmediatamente cesanteado!!! Es inconcebible que un embajador cuestione un proceso impecablamente republicano y democrático", aseguró en Twitter Diego Guelar, ex embajador trasandino en China y Estados Unidos.
Eduardo Amadeo, ex embajador argentino en Washington, también fustigó a Bielsa: "Lamentable! Un embajador que sólo habla para que lo aplauda la Cámpora (la agrupación de Máximo Kirchner)".
Mientras que Mariano Caucino, especialista en Relaciones Internacionales y ex embajador argentino en Israel y Costa Rica, opinó que "Bielsa ha vuelto a provocar un serio daño en el vínculo argentino-chileno y debería ser removido inmediatamente. Sus declaraciones implican una inaceptable intromisión en el proceso electoral chileno (...) mientras por otro lado dice no internevir en cuestiones internas frente a dictaduras en Cuba, Venezuela, Nicaragua", según consigna el diario La Segunda.