La tienda liderada por Marco Enríquez-Ominami no obtuvo los votos suficientes para seguir adelante.
Una decena de colectividades políticas está en la misma situación.
"Copihue, Fuerza Progresista del Norte", formado por el mismo PRO, será el partido aliado del ex diputado.
El Partido Progresista, liderado por Marco Enríquez-Ominami, ya definió su fórmula para seguir funcionando, luego de que el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel) ordenara la cancelación de su inscripción por no haber alcanzado la votación mínima establecida por la ley en las últimas elecciones parlamentarias, del 17 de noviembre.
El PRO afronta este problema junto a una decena de colectividades: el PRI, el Partido Humanista, el Partido Ecologista Verde, el Partido Igualdad, el Partido Liberal, el Partido Ecologista Verde del Norte y Fuerza del Norte.
Para que sigan funcionando la ley exige a los partidos políticos obtener el 5 por ciento de los votos en tres regiones consecutivas, el 5 por ciento en ocho regiones a lo largo del país o haber elegido cuatro parlamentarios, condiciones que todas estas fuerzas incumplen y que llevarán a su cancelación desde el 16 de abril.
La norma contempla opciones para que las colectividades puedan seguir existiendo, como volver a constituirse o fusionarse con otra colectividad o un partido "satélite" de regiones.
"Copihue"
En tal sentido, el secretario general del PRO, Camilo Lagos, informó la fusión con un segundo partido que están formando ellos mismos en el norte.
"Nosotros no vamos a desaparecer. Ningún partido después de tanto trabajo tira al tacho de la basura ese esfuerzo; nosotros vamos a mantener la legalidad", afirmó.
En el PRO "somos un partido con siete alcaldes y 50 concejales, con tres consejeros regionales, con 40 mil militantes, por lo tanto, el mecanismo que hemos elegido es la fusión con otro partido, que es un partido que estamos creando en el norte y que es el partido 'Copihue, Fuerza Progresista del Norte'", indicó.
Esta fórmula es la más eficiente para las colectividades, ya que pueden crear un partido nuevo en tres regiones consecutivas; por ejemplo, las de Arica, Tarapacá y Antofagasta, que son las que tienen menos habitantes y exigen menos firmas: unas 1.500.
Si quisieran reinscribirse como PRO, que hoy existe en todo Chile, requerirían cerca de 36 mil firmas.
El Movimiento Amplio Social (MAS), del senador Alejandro Navarro, ya está llevando adelante su proceso de reinscripción en Arica.
